Con el levantamiento de barreras que se hace efectivo a las 22:00 horas de este martes, último día de 2019, la AP-7 entre Tarragona y Alicante pasa a ser gratuita después de 48 años de pago de peajes.
Aun que oficialmente, sobre papel, la AP-7 será gratuita a las 00.00 horas del 1 de enero, en la práctica, esa gratuidad se h aadeltantado horas, según la prensa valenciana Las Provincias. Así, los vehículos que atraviesen alguna de las cabinas de peaje a las 22.00 horas ya no tendrán que abonar ningún importe por el viaje. Una decisión que se ha tomado para facilitar, dicen las mismas fuentes, los últimos desplazamientos y para permitir que los trabajadores puedan pasar la noche en su casa.
La liberación de la autopista por parte del Ministerio de Fomento no solo supone un ahorro para los vehículos particulares, sino también para los transportistas ya que ahora obliga a analizar la evolución futura de la demanda y planificar la movilidad, actuando para mejorar la conectividad de la AP-7 con los municipios que atraviesa.
Los 367 kilómetros de la autopista entre Tarragona y Alicante se integrarán así en la red estatal de carreteras de alta capacidad gratuitas y se gestionará bajo los mismos criterios que el resto, según indicó a EFE el secretario general de Infraestructuras, Julián López.
La liberalización de la AP-7 "culmina una lucha de muchos valencianos" por estar casi cincuenta años pagando, según el diputado en el Congreso por Compromís, Joan Baldoví, que ha agradecido su labor a todos los que a lo largo de los años han concienciado a la sociedad y han presionados a los políticos para lograr una vía libre de peaje. "Son casi 50 años pagando, y ha habido tres ampliaciones, dos propiciadas por grupos socialistas y otra por Aznar", ha recordado Baldoví en declaraciones a EFE.
La gratuidad supondrá un importante ahorro para los transportistas que la Federación Valenciana de Empresarios del Transporte (FVET) ha cuantificado entre 2.000 y 2.500 euros por vehículo.