Tal como estaba previsto, el Parlament ha aprobado por unanimidad el retorno de la paga extra del 2012 a los funcionarios, a iniciativa de Ciudadanos, PSC, Catalunya Sí que es Pot, PP y la CUP. Después de que la CUP anunciara el martes 19 que votaría en contra de la enmienda que quería presentar Junts pel Sí para condicionar este pago a disponibilidad presupuestaria, los junteros han negociado con todos los partidos y los sindicatos para evitar la imagen de la primera desavenencia con los cuperos después del acuerdo de investidura y así garantizar la estabilidad parlamentaria. El acuerdo, que han suscrito todas las fuerzas políticas, establece que esta paga extra de los trabajadores públicos se devuelva de manera progresiva antes del primer trimestre del 2018.
El portavoz de Junts pel Sí en esta materia, el republicano Sergi Sabrià, ha celebrado el acuerdo porque, ha dicho, "al margen de discrepancias ideológicas todo el mundo sabe que la Generalitat no tiene los 1.800 millones de euros para hacer frente a este pago".
Reproches de la oposición
Desde Ciudadanos y Catalunya Sí que es Pot, Joan Sabadell y Marc Vidal han coincidido en que el Govern ha "utilizado" a los funcionarios para cuadrar las cuentas públicas. Sabadell no ha perdido la ocasión para atribuir la acumulación de deuda de la Generalitat a la "creación de estructuras administrativas innecesarias y duplicadas", por lo cual Sabrià lo ha acusado de utilizar "tópicos", ironizando con que sólo le "ha faltado sacar a pasear a las embajadas y TV3".Por su parte, la CUP ha acusado al PP y al PSOE de "hipócritas" por criticar las finanzas de la Generalitat, cuando el endeudamiento "ya se produjo durante el gobierno tripartito" y socialistas y populares aprobaron en el Congreso la reforma el artículo 135 de la Constitución que "priorizaba los mercados por encima del sector público".
Riña final entre PP y CUP
Justo antes de proceder a la votación, la ponente del PP, María José García Cuevas, ha pedido la palabra para clarificar a Benet Salellas que la modificación del artículo 135 de la Constitución "afectaba a todas las comunidades autónomas y no significa que no se tenga que pagar a los funcionarios", y ha querido remarcar que "todas las comunidades están pagando la deuda, menos Catalunya". El portavoz de la CUP le ha respondido que le argumente fuera del salón de plenos –ya que no quedaba tiempo de intervención–, por qué, entonces, este artículo "se aprobó de forma tan antidemocrática".Sabrià ha lamentado que la oposición haya defendido un acuerdo por unanimidad "enfadados", ya que "es un buen acuerdo", cosa que ha motivado las réplicas de los ponentes del PSC y del CSQP. Alícia Romero ha espetado que cada uno defiende sus posiciones como cree conveniente y que se podía haber llegado antes a este acurdo, y Marc Vidal ha sido más afable y ha respondido que él también encuentra el acuerdo "un buen acuerdo" y que no lo hace "enfadado".