La concesión de los indultos a los presos independentistas catalanes ocupa todas y cada una de las conversaciones en Madrid y se ha convertido en el gran motivo de enfrentamiento entre la derecha y el Gobierno del PSOE y Podemos. El artículo que Oriol Junqueras publicó este lunes sacudió el tablero político. El español y el catalán. Pedro Sánchez se ha agarrado a él como a un clavo ardiendo y los socialistas han alabado la actitud del presidente de ERC, mientras que en Catalunya, Junts, la CUP y la ANC han lamentado que se ponga en cuestión la vía unilateral.
En medio de este ruido, el president de la Generalitat mantenía el silencio. Durante la rueda de prensa posterior al consejo ejecutivo del martes, la portavoz Patrícia Plaja intentó esquivar la cuestión, sin admitir si había generado tensión en la reunión semanal de Aragonès y sus consellers. Se limitó a comunicar el consenso entre socios por el "diálogo permanente".
Amnistía y autodeterminación
Este miércoles, finalmente, el jefe del ejecutivo se ha referido al asunto. Lo ha hecho, eso sí, en una intervención pública sin preguntas. Ha sido durante la clausura del acto de presentación del informe del Grupo de Trabajo 2022 sobre las propuestas para transformar Catalunya después de la pandemia.
Aragonès ha puesto el énfasis en la recuperación económica y social, pero ha reservado unos minutos de su discurso para dejar claro que la salida de la crisis no puede hacer olvidar ni restar esfuerzos para resolver el conflicto político. A pocas semanas para que el consejo de ministros apruebe definitivamente los indultos prometidos, y a la espera de ver en qué términos lo hace, el president catalán ha lanzado un aviso. "El conflicto político que tenemos que abordar sin demora no acabaría sólo con los indultos".
Posteriormente ha desarrollado la idea, recordando que más allá de los presos políticos, hay todavía "exiliados y compañeros pendientes de juicio". Es el caso de todos los miembros del Govern Puigdemont-Junqueras con causa abierta en el juzgado de instrucción número 13. En pocas semanas, el Tribunal de Cuentas volverá a la carga contra la acción exterior de los gobiernos de Mas y Puigdemont.
Por todo ello, Aragonès ha insistido, un día más y ante las dudas que se hayan podido generar, en que la solución pasa por la amnistía y la autodeterminación.
En la imagen principal, Aragonès durante su discurso en el Palau de la Generalitat. / S. Alcàzar