Junts per Catalunya y el PSOE han acordado la delegación integral de las competencias de inmigración a la Generalitat de Catalunya a cambio que los del president Puigdemont se abstuvieran en la convalidación de los tres decretos anticrisis para que salieran adelante (el decreto sobre el subsidio fue rechazado finalmente por los votos en contra de Podemos). A pesar de los interrogantes que hay sobre la mesa sobre lo que significa este acuerdo, las dos partes lo tendrán que reflejar en una ley orgánica, que tendrá que plasmar esta delegación a través del artículo 150.2 de la Constitución española. El acuerdo ha provocado recelos en varios lados. Desde el PP hasta la CUP. Quien también se ha expresado crítico es el Govern de la Generalitat, que ha intentado minimizar el pacto asegurando que "hay que ver la letra pequeña" y que lo que hay ahora simplemente es "una declaración de intenciones".

El president de la Generalitat, Pere Aragonès, también se ha referido sobre el acuerdo entre juntaires y socialistas: "Más allá de las sensaciones y de los titulares, hay que ver cómo se concretan estas cosas, porque de momento lo que conocemos es todo muy genérico y no hay detalles", ha dicho el president del Ejecutivo de ERC en una entrevista en La Vanguardia. De hecho, ha priorizado y valorado más la convalidación de los decretos anticrisis que "facilitan herramientas para proteger a los catalanes de la pobreza". "Los acuerdos relevantes de esta semana que se han producido son otros", ha dicho el president.

A pesar del intento de minimizar el acuerdo con Junts, Aragonès ha asegurado que al ser independentista quiere "todas las competencias de inmigración", pero también carga contra el partido de Puigdemont por su discurso sobre la inmigración. "Mezclar inmigración y delincuencia es un error y se aleja del catalanismo que también Junts o anteriormente Convergència había defendido", afirma la cabeza del ejecutivo catalán.

"Tenemos un planteamiento estratégico muy claro que no se basa en correrías de último momento"

En esta línea, el president también ha instado al Gobierno de Sánchez a reflexionar sobre cuál de las dos estrategias de ERC y Junts les favorece y cuál no lo hace, sobre todo después de que los de Puigdemont tensaran la negociación sobre la convalidación de los tres decretos ley hasta el último minuto. Tenemos un planteamiento estratégico muy claro que no se basa ni en tácticas ni correrías de último momento. Tenemos una clara apuesta por la negociación, por la resolución del conflicto, para poder culminarlo con el ejercicio de un referéndum," dice Aragonès, quien marca como objetivos para este 2024 conseguir la financiación singular para Catalunya, la culminación del traspaso de Rodalies y la defensa de la lengua catalana.

La amnistía y presupuestos

Con respecto a la amnistía, el president subraya que si presentan enmiendas será para hacerlo de forma conjunta con el PSOE y Sumar para que "sea una ley sólida". "Hay enemigos de la resolución en la conexión del conflicto político que intentarán boicotear la aplicación de la ley de amnistía", afirma Aragonès. Sobre los presupuestos de la Generalitat del 2024, pide responsabilidad al PSC, Junts, comunes y la CUP y intenta desvincularlos de las negociaciones de las cuentas estatales. "Se tendrán que negociar, aquí y allí", avisa el president.

Sequía, enseñanza y renovables

El president se ha referido, al mismo tiempo, de los problemas de país, como la sequía y ha reivindicado que hace dos años activaran el plan especial. "Hemos resistido extraordinariamente bien y tenemos que seguir ampliando infraestructuras porque habrá más sequías", afirma Aragonès, quien ha recordado que la mayoría de partidos han dirigido la Agència Catalana del Agua durante los últimos años al ser preguntado por la falta de inversión. Además, rechaza tajantemente la conexión de las aguas del Ebro con las cuencas internas porque va "en contra del criterio de la UE". El líder de ERC, a la vez, se ha mostrado convencido de que la gran inversión en Educación de los últimos años se verá reflejada en los próximos años. "Los resultados no se producen de la noche a la mañana", dice el president, a pesar de los malos resultados de los exámenes PISA. De hecho, por eso su Govern restringirá el uso del móvil en la primaria y lo regulará de forma restrictiva en los institutos.

Preguntado por la situación actual de las energías renovables, Aragonès ha sacado pecho de su obra de gobierno y recuerda que eso no se hace "de un día para el otro". "Cuando empezamos esta legislatura había nueve megavatios autorizados en fase de tramitación para construir centrales de energías renovables. Ahora ya estamos superando los 1.600 megavatios", subraya.

Aragonès también saca pecho de los tres años de su Govern, con el Pacto Nacional por la Industria, la reducción del paro y la desjudicialización del conflicto entre Catalunya y el Estado. "Quiero recordar que cuando fui investido teníamos nueve personas en prisión y no había ningún marco de diálogo", afirma Aragonès, quien ha reivindicado el diálogo con el Gobierno. También ha sacado pecho con el traspaso de Rodalies acordado con el Gobierno, que incluye la creación de una empresa mixta formada por Generalitat y Estado. Sobre el aeropuerto, Aragonès apuesta por dialogar a fin de que haya más conexiones, "especialmente hacia el Pacífico".

Aragonès apuesta por acabar el mandato y ser él la cabeza de cartel de ERC

Asimismo, el president se ha mostrado convencido de que las elecciones serán en febrero del 2025 y que acabará la legislatura aprobando los presupuestos. "Tengo toda la energía, toda la fuerza y me gustaría ser el candidato", ha dicho el president, preguntado por quién tenía que ser la cabeza de cartel de ERC en las próximas elecciones.