Ya hace tiempo que se llevaron a cabo los cambios en los Mossos d'Esquadra, empezando a finales del año pasado con la destitución de Josep Lluís Trapero. A partir de la remodelación de la cúpula fueron muchos los partidos políticos que exigieron explicaciones, y en especial la comparecencia del responsable, el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, que compareció en una comisión extraordinaria en el Parlament para ser sometido a las preguntas de los grupos. Las explicaciones no fueron consideradas suficientes y los comuns exigieron la comparecencia del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, para explicar estos cambios como máximo responsable, y así se producirá en el pleno de la próxima semana.
Esta mañana en el Parlament, justo un día después de que el TSJC haya dejado a un paso la presidenta Laura Borràs por la causa de la Institució de les Lletres Catalanes, se ha reunido la Mesa y la Junta de Portavoces. En total ambas sesiones se han alargado más de cuatro horas, pero a pesar de la sospecha, fuentes parlamentarias han asegurado que no se ha abordado en ningún momento la situación de Borràs, sino que principalmente se ha acordado la preparación del pleno de la próxima semana que se alargará de martes a jueves. La comparecencia de Aragonès será en principio el miércoles, a falta de confirmación.
La solicitud de comparecencia del presidente de la Generalitat fue aprobada en el pleno de finales de febrero sin incidentes, porque incluso Esquerra y Junts votaron a favor de esta. A pesar de que ambos grupos votaron a favor, aseguraron que no hay nada de sospechoso en el relevo, insistieron en el compromiso del ejecutivo contra la corrupción y defendieron los cambios para estar orientados a la mejora del cuerpo policial.
Explicaciones insuficientes
Los comuns exigieron esta comparecencia porque consideran que los cambios fueron arbitrarios y opacos, y explicaron que estaban especialmente preocupados por los cambios en la Comisaría General de Investigación Criminal. La petición de los comuns llegó después de que Joan Ignasi Elena explicara que el objetivo de los cambios al frente de los Mossos se enmarcan en la necesidad de nuevos liderazgos para afrontar la nueva etapa que tiene que situar el cuerpo de cara al 2030. El conseller también negó cualquier "purga" y defendió que ha hecho lo mismo que han hecho a los otros consellers de Interior y que tomó las decisiones después de haberse reunido con los comisarios y haber visitado comisarías para conocer el funcionamiento del cuerpo y cuál tenía que ser el rumbo de los Mossos d'Esquadra y del nuevo modelo de dirección.
Un día después de estas explicaciones el portavoz de los comunes David Cid cargó contra ellas: "No fue capaz de explicar cuáles son los motivos que hacen incompatible la presencia de Trapero y Rodríguez con el nuevo enfoque que dice prometer".