El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha suspendido su agenda pública de este miércoles, justo al día siguiente que su socio en el Govern, Junts per Catalunya, le planteara una cuestión de confianza si no aporta "garantías y concreciones" del acuerdo de gobierno. Fuentes próximas apuntan que el president entiende que la demanda de Junts implica directamente la retirada de la confianza en el president y el Ejecutivo. Aragonès estará este miércoles en Palau y que mantendrá varias reuniones, sin embargo, no está sobre la mesa que el presidente no se presentará a ninguna cuestión de confianza, tal como ya subrayó el pasado martes en el pleno.
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No solo Aragonès ha suspendido su agenda pública, la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà, y el vicepresident, Jordi Puigneró, también lo han hecho. Hasta el momento, estos son otros dos miembros del Gobierno que han alterado su agenda tras el pleno de ayer.
Junts, la CUP y la moción de confianza
En las postrimerías de un pleno particularmente largo, el president del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, planteó que si no se cumplía el acuerdo de gobierno, su partido pedir al president una cuestión de confianza. "Necesitamos claridad y garantías del cumplimiento del acuerdo", aseguró. Este miércoles, Batet ha vuelto insistida en esta demanda en una entrevista en Catalunya Radio, donde ha asegurado que la cuestión puede ser "una oportunidad" para dar "más garantías y estabilidad al Govern".
Por su parte, en el pleno de ayer, Aragonès cerró la puerta a esta opción: "No entraré en ningún juego que suponga poner en riesgo el Govern. Si alguien tiene que tomar decisiones que las tome. Yo no puedo tomar las decisiones que corresponde a otros y que hace semanas que hace falta que se tomen. Pido que cuando se tienen que tomar decisiones se haga con celeridad. Yo, como president, tomaré las mías".
En el caso de la CUP, la formación ha presentado una moción ante la Mesa del Parlament donde pide que el president Pere Aragonès se someta a una cuestión de confianza antes de que acabe este año. En la moción presentada por la CUP, se concluye: "Ante el cambio de alianzas del gobierno respecto a la investidura, y, por tanto, de mayorías parlamentarias, y ante el incumplimiento del acuerdo que hizo posible el inicio de legislatura, el Parlament de Catalunya insta al Govern a que el president de la Generalitat se someta a una cuestión de confianza antes de que finalice el año 2022". La diputada de la CUP, Eulàlia Reguant, ha asegurado que su partido no supo hasta anoche en el debate de política general que Junts también planteaba una cuestión de confianza en Aragonés. Esta moción llega al pleno la próxima semana.
Otras formaciones se han posicionado respecto a esta demanda. Salvador, Illa, primer secretar del PSC, rechazó que sea el momento para presentar esta cuestión. "Creo que es un momento muy delicado el que estamos viviendo y no voy a ser yo quien añada más inestabilidad en un entorno ya muy inestable".