Archivado por segunda vez. Una magistrada de Barcelona ha decretado el archivo de la querella presentada por la fotoperiodista Sira Esclasans contra agentes de los Mossos de Esquadra al resultar herida por un proyectil de foam en la pierna izquierda cuando cubría una manifestación ante el Departament de Interior contra la sentencia del procés, el 16 de octubre de 2019. La titular del juzgado de instrucción 25 de Barcelona archivó el caso en el 2021 porque no se podía aclarar el escopetero que habría lesionado Esclassans, que fue herida cuando trabajaba para ElNacional.cat. Abogadas de Irídia consiguieron, en octubre de 2022, que el Tribunal Constitucional (TC) ordenara la reapertura de su caso porque se le habían vulnerado derechos fundamentales. Ahora, después de una nueva instrucción -con el interrogatorio de dos escopeteros i de caporales de los Mossos, como investigados-, la magistrada Elena Carasol ha decretado el archivo del caso al mantenerse la incógnita de quien hirió a la fotógrafa freelance. En la resolución, la magistrada hace un resumen de todo lo investigado, y sin motivación, archiva el caso, afirmando “los artículos antes citados”. La resolución no es firme y se puede presentar recurso.
En la investigación del caso recogida en la resolución, a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat, los responsables de la Policía catalana se han salido por la tangente: no han aclarado cuál de sus escopeteros podría haber herido a la fotoperiodista y han asegurado que aquel día en aquella zona también actuaron agentes de la Policía Nacional, y que se desconoce si también dispararon a los manifestantes. Había 7 furgonetas y 5 escopeteros, solo de los Mossos, se indica. El abogado de los cuatro agentes investigados, Josep Lluís Florensa, pidió el archivo de la causa, petición compartida por la Fiscalía, y ahora lograda.
Más de 200 unidades SIR-X disparadas
En la causa, la magistrada detalla que ha requerido informes de los Mossos sobre su actuación, y reproduce parte de las respuestas de dos escopeteros y superiores suyos, además de la declaración de la fotoperiodista y del fotógrafo que estaba a su lado aquel día. Ella explicó que la noche del 16 de octubre de 2019, estaban entre la calle Diputación y el paseo de Sant Joan, haciendo fotos a los manifestantes y a la policía y cuando se giró para marcharse, fue herida en el gemelo izquierdo por un proyectil de foam, que le provocó un hematoma y una pequeña cicatriz. Su compañero recogió el proyectil y se le dio, pero no vio al autor del disparo.
Por su parte, los mossos sostienen que los concentrados les empezaron a tirar cosas a poca distancia, y que se protegieron en un camión que quedó en medio de la vía. Los dos escopeteros investigados aseguraron que no dispararon hacia los periodistas, sino "a la masa hostil", y que los coordinadores hicieron gestos y dijeron a los periodistas que se apartaran de la zona. El informe de la unidad de Asuntos Internos de los Mossos indica que aquella noche se dispararon 235 unidades de SIR-X y 29 de SR, pero no aportaron ninguna fotografía para identificar los agentes. Y, sin autor conocido, no se puede continuar ninguna investigación penal, y por eso la magistrada ha archivado por segunda vez este caso, como pasa a menudo en estas actuaciones policiales.
Jóvenes heridos durante el 1-O
Varios jóvenes fueron heridos de gravedad con proyectiles de foam, especialmente durante los disturbios de las protestas contra la condena del Tribunal Supremo a los líderes independentistas. Con una campaña informativa y de denuncia, la entidad de Derechos Humanos Irídia consiguió que el Parlament aprobara que el cuerpo de la policía catalana tiene que retirar el modelo de proyectil de foam más letal; aunque no consiguió su reclamo que este fuera retirado totalmente del cuerpo, como se hizo en el 2014 con las pelotas de goma.
Aparte, el Departament de Interior, finalmente, aceptó indemnizar con 69.000 euros a una chica herida gravemente a la cabeza con un foam, cuando se manifestaba en el barrio de Gracia. Hay más heridos durante el 1-O, pendientes de una respuesta del Govern.