El éxito de la inmersión es indiscutible pero la dejadez de la administración a la hora de gestionar y cuidar el modelo de escuela catalana, una vergüenza. Esta es la idea que ha expuesto este martes el maestro y pedagogo Joaquim Arenas, considerado uno de los artífices de la escuela catalana, en el debate La immersió, en perill? La immersió, viva! que ha organizado ElNacional.cat y se ha celebrado en el Palau Robert de Barcelona, en el que también han participado el filósofo y articulista Bernat Dedéu, la secretaria general de la Fundació Escola Cristiana de Catalunya, Meritxell Ruiz, y el fundador de 'La Lectora', Marc Rovira.
"La inmersión era un conjunto de técnicas para que un grupo de niños aprendieran en un tiempo rápido una lengua determinada. Y es un éxito total porque los niños que entran con una lengua que no es el catalán lo aprenden", ha explicado Arenas. Y respondiendo a lo que se dice, que la mayoría de alumnos cuando van por la calle hablan en castellano, Arenas ha sido claro: "Preguntadles alguna cosa en catalán, ya veréis como responderán".
Arenas, sin embargo, sí que ha criticado "la dejadez" de la administración, la cual ha calificado de "vergonzosa". Y ha puesto como ejemplo que desde la Generalitat no se han puesto los recursos suficientes para que la inmersión siguiera haciéndose de manera efectiva.
También ha apuntado que se ha perdido la falta de entusiasmo por el catalán que había años atrás y que trasladaba la enseñanza de la lengua a todo un barrio, más allá de la escuela. Para Arenas, toda esta bajada empezó cuando entraron los "independentistas", en referencia al momento que ERC asumió la conselleria de Educació con el tripartito. Y a nivel anecdótico ha revelado que al president Tarradellas "le daba miedo el catalán porque pensaba que podía dividir a la sociedad".
TV3, "vergonzosa"
El maestro y pedagogo ha instado también en dejar de ver el catalán únicamente como una lengua escolar y ha llamado a tener "conciencia lingüística y social", espíritu crítico y "fidelidad lingüística". Y en este sentido, TV3 no se ha escapado de sus críticas, y también de las de los otros ponentes. "TV3 es una pura vergüenza", ha dicho.
Por último, preguntado sobre qué se tiene que hacer ante las imposiciones judiciales de aplicar un 25% de castellano en las escuelas, Arenas ha respondido que "nos tenemos que liberar del castellano". Y a pesar de reconocer que si fuera maestro "tendría un poco de miedo","si se ven apuntalados por la sociedad civil y los padres", ha considerado que será más fácil defender el modelo. "No plantar cara no sirve de nada y crea más desánimo en la gente. Si se hace bien, saldremos adelante. La escuela catalana es una joya que hemos creado. No puede ser que venga un togado y lo tire todo por el suelo", ha concluido.