El periodista Diego Fonseca se ha preguntado en un artículo de opinión publicado este sábado a The New York Times como el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha podido "arruinar tan pronto" una carrera política que parecía prometedora.
El articulista considera que el partido naranja tiene, a estas alturas, más camino por recorrer sin Rivera al frente. Para el periodista, el aceleración en la que ha vivido Rivera los últimos años no ayuda a dirigir al partido en el centro que reclaman los votantes de ciudadanos. "Rivera habría de repensar su camino", recoge el artículo, "si lo que ahora importan son las ideas y no los nombres".
Rivera es para Fonseca heredero de la "desvergüenza". En el artículo, de tono duro y contundente, ha explicado que la carrera del líder de ciudadanos ha sido un producto de decisiones abruptas y espontáneas y lo que ahora necesita el partido es un punto de moderación, producto de una discusión estratégica, formal y sólida. Por este motivo, es necesario que Rivera dé "un paso al lado y dé espacio a otros firguras del partido", ha escrito.
Además de dar un repaso por la trayectoria política de Rivera, el artículo explica la actual crisis de Ciutadans, después de que pesos pesados hayan abandonado el partido, ya que no ha sido capaz de posicionarse "hacia la derecha, todavía abrazada en el PP, ni del "nacionalismo español, casado con los ultras de Vox", y todavía menos y tal como había prometido, "del centro político".
El opinador considera el movimiento "hacia el extremo" de Rivera una mala señal que le ha jugado a la contra, ya que a los países "les suele ir bien cuándo optan por la moderación". Tal como ha dicho al artículo del The New York Times, un partido liberal moderno o uno de centroderecha inteligente es un buen contrapeso sistémico sano a la centro-izquierda y a la izquierda. Una opción que Rivera no ha sabido materializar.
"El partido que tenía que ocupar el centro liberal de España, que tenía que absorber a los conservadores moderados y a los socialdemócratas defraudados del PSOE," ha apuntado Fonseca en el artículo, "es ahora un plato cada vez más intragable, que se suma a acuerdos de rapiña para conseguir dirigir algunas ciudades y pueblos".
En democracias parlamentarias como la española, dice el artículo, el centrismo facilita la constitución de gobiernos. Como ejemplo, el periodista ha argumentado que hoy se podrían llegar a consensos menos traumáticos con una "centroderecha racional" que con la "derecha enojada del PP y la rabiosa de Vox".
Como conclusión, el periodista entiende "el centro que podría haber aprovechado Rivera" como una bisagra, porque permite flexibilidad y aleja las fracturas y ha recordado que Ciutdadanos nació el 2005 con la idea de representar este centro. "Esta maniobrabilidad es la que España pierde con la crisis del partido", ha concluido.