El president Artur Mas ha asegurado que Jordi Pujol se equivocó cuando en julio del 2014 hizo su recordada confesión sobre la herencia familiar en el extranjero. Según Mas, Pujol se puso al frente de un problema que había en el ámbito familiar, asumiendo por eso "un coste político que ha trascendido más allá de su persona". Así lo ha asegurado en una entrevista publicada por El Periódico, en la que también ha asegurado que cuando llegue el juicio, será difícil que se demuestre si Jordi Pujol tuvo un papel activo en la trama y también un enriquecimiento personal, contraponiéndolo a la figura de Juan Carlos I, que, ha recordado Mas, "movía a su nombre y al de su familia decenas de millones", pero la fiscalía ya ha archivado las investigaciones sobre la figura del emérito.
Mas hace referencia al comunicado publicado por Jordi Pujol el 25 de julio de 2014, cuando él era president de la Generalitat, en el que confesaba la existencia de una herencia familiar no declarada en el exterior, que venía del legado de su padre. Ahora, casi diez años más tarde, Artur Mas considera que las palabras de Pujol fueron un error mientras desea y espera que la figura de Pujol pueda volver a la plena normalidad". "Sé que no es del todo posible. Cada vez que pasa un poco más de tiempo va recuperando una buena parte de su prestigio y credibilidad, pero difícilmente llegará al nivel de antes del 25 de julio del 2014". Como presidente de la Generalitat en aquel momento, fue el mismo Mas quien le retiró las atribuciones de expresidente, hecho que ahora describe como una de las decisiones más dolorosas que tuvo que tomar desde el Palau: "No tuve otro remedio. Si no lo hubiera hecho, me habría obligado el Parlament. No fui yo, lo hicimos de común acuerdo. No fue una imposición mía, fue una conversación en la que llegamos a la conclusión de que era lo que teníamos que hacer, por muy doloroso que fuera para mí.
Artur Mas, en la presentación de la recopilación de artículos de Jordi Pujol
En la entrevista, Mas asegura que "cada vez que pasa un poco más de tiempo va recuperando buena parte de su prestigio y credibilidad". Y, a pesar del ictus isquémico que sufrió meses atrás, Jordi Pujol ha recuperado parte de su vida pública en las últimas semanas. Sin ir más lejos, Pujol asistió, el 8 de febrero a la presentación del libro Des dels turons a l'altra banda del riu. Entre l'acció i l'esperança, de que recoge los artículos que escribió desde la prisión entre 1961 y 1962. Durante el acto, Pujol afirmó que "la fuerza de Catalunya que se ha ido recuperando ahora vuelve a estar en peligro de ser presionada en sentido negativo", y llamó a "recuperar la voluntad de tirar adelante". "Hace falta que hagamos un nuevo esfuerzo", expresó. Entre el público estaba el mismo Artur Mas, los actuales consellers Joaquim Nadal y Carles Campuzano; y exconsellers como Jaume Giró, Victòria Alsina, Lourdes Ciuró, Joaquim Forn, Josep Rull, Santi Vila; la expresidenta del Parlament Núria de Gispert; y el exlíder de la ANC y exsecretario general de Junts, Jordi Sànchez.
En la entrevista, Artur Mas ha valorado que la mayoría de medidas del acuerdo institucional contra la corrupción que impulsó cuando era presidente de la Generalitat se han ido implementando. Al mismo tiempo, sin embargo, cree que no es un problema solucionado, aunque hay más control y conciencia por parte de las instituciones y de la sociedad. "Se ha ido instalando esta sensación de prácticas irregulares y de corrupción desde las más altas instancias y eso no es positivo ni recomendable", ha concluido.