El arzobispo de València, monseñor Enrique Benavent, ha presidido la misa funeral que se ha celebrado este lunes en la catedral de València en homenaje de las 222 víctimas mortales y los cuatro desaparecidos que provocó la DANA en el País Valencià el pasado 29 de octubre. Ante la presencia de 400 familiares de las víctimas, los reyes y varias autoridades estatales, autonómicas y locales, el arzobispo ha hecho un llamamiento a evitar las "divisiones" con el fin de superar las consecuencias del temporal. "En esta homilía le pedimos al señor que las dificultades no nos lleven a caer en la insolidaridad, que las diferencias no lleguen a convertirse en divisiones, que las perspectivas diferentes a la hora de hacer frente a los problemas no perjudiquen los más necesitados, que los intereses propios no prevalezcan sobre el bien común. Solo así podremos mirar el futuro con esperanza", ha afirmado.

La solidaridad, "pequeños brotes en medio de un desierto"

Benavent ha dedicado la misa a todos los que están "sufriendo" por las inundaciones, principalmente a aquellos que han perdido seres amados o que viven la incertidumbre de no saber dónde están; pero también a los que han perdido el trabajo o la casa, o a los niños que no han podido ir a la escuela en las últimas semanas. Además, ha tenido unas palabras de recuerdo para aquellos que se han visto afectados por la DANA en otros territorios del Estado, como Andalucía o a Castilla-La Mancha. El arzobispo ha subrayado que la celebración que ha dirigido esta tarde tenía un "carácter eclesial" y que no pretendía ser ninguna otra cosa, pero que iba dirigida a cualquier persona, sin necesidad que profesara la fe cristiana. "Todos hemos compartido una misma experiencia, y como nos sentimos hermanos de todos, a todos queremos incluir en nuestra oración", ha explicado.

Algunos de los familiares han traído fotografías de las víctimas mortales. Foto: EFE

Una parte de la homilía ha sido un reconocimiento a la "solidaridad" que despertó la tragedia, por parte de los vecinos, que "arriesgaron su vida para salvar a otros"; los voluntarios, que "se ofrecieron a ayudar de forma espontánea"; las asociaciones e instituciones, que ofrecieron espacios y recursos; y los cuerpos de seguridad y los servidores públicos, que "trabajaron con profesionalidad". "En los acontecimientos tan dramáticos que hemos vivido, hemos visto muchos signos de esperanza; personas que han fortalecido las manos débiles, que han animado a los inquietos y les han dicho: 'Sed fuertes, no temáis'. Personas que han puesto gestos de alegría en medio de tanto sufrimiento. Son como pequeños brotes en medio de un desierto", ha señalado Benavent.

Familiares rechazan participar en la misa por la presencia de políticos

Los familiares de las víctimas denunciaron el viernes pasado que no habían sido invitados al funeral, mientras que desde el inicio se había anunciado la presencia del rey Felipe VI y la reina Letizia. Posteriormente, la archidiócesis de València rectificó, y facilitó un teléfono a los familiares para que se pusieran en contacto directamente con la iglesia para poder asistir, o bien que se dirigieran al párroco de su pueblo. Finalmente, unos 400 familiares han participado en la misa, que han seguido desde los bancos centrales de la nave, con las autoridades en los laterales. Sin embargo, hay algunos afectados que han rechazado asistir a causa de la presencia de representantes políticos.

Felip VI i Letícia arriben a la catedral de València entre aplaudiments. Foto: Europa Press

El presidente de la Asociación de Damnificados por Dana Alfafar / Horta Sud, Christian Lesaec, ha explicado que muchos de los afectados se han negado a "compartir espacio" con ningún representado político estatal o autonómico, a los que consideran "sospechosos de haber contribuido al desastre". "Tenemos que intentar tener la máxima corrección, empatía y sensibilidad con estas familias", ha lanzado, en referencia al Arzobispado. En este sentido, ha señalado que no quieren que "un acontecimiento tan íntimo y sentido" sirva para "limpiar una imagen manchada por el barro". De hecho, una vecina de Picanya, que perdió a su padre en la DANA, ha decidido marcharse de la catedral de València después de la llegada del president de la Generalitat, Carlos Mazón. "No quiero compartir espacio con ciertos representantes que han venido aquí esta tarde", ha afirmado.

Aparte de Mazón, han estado presentes otros presidentes autonómicos del PP, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; el presidente de Murcia, Fernando López Miras, y el presidente de la Junta de Andalucía, Juamna Moreno Bonilla. También ha asistido el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, que ha llegado tarde a la ceremonia. En representación del Gobierno han estado presentes en la misa la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, que también es la secretaria general del PSOE en el País Valencià.

Feijóo, Morant, Torres, Montero y Mazón encabezaban el sector de autoridades. Foto: EFE

Aplausos para los reyes, gritos de "asesinos" para los políticos

Los reyes han sido recibidos entre aplausos en la entrada y salida de la catedral, y han seguido la misa desde el presbiterio. Al acabarse, se han detenido a saludar a varios familiares, que les han agradecido su presencia. Los representantes políticos, sin embargo, no han recibido una bienvenida tan cálida, y aunque en el interior de la catedral los ánimos se han mantenido calmados, a la salida, varias personas los han increpado al grito de "asesinos", una palabra especialmente dirigida contra Mazón y también contra Pedro Sánchez, a pesar de su ausencia. Una mujer, vecina de Benetússer que perdió a la suegra durante la DANA, incluso se ha acercado a Mazón para acusarlo de "cobarde" preguntarle si duerme tranquilo después de las 222 muertes, según ha recogido el diario Levante. Según ha detallado después a la prensa, Mazón le habría dicho que "tiene mucha empatía" pero se habría justificado diciendo que el día de la DANA "no tenían información".

 

Protesta en el exterior de la catedral contra los representantes políticos. Foto: EFE