Carles Puigdemont, y el resto de exiliados, vivirán este 2022 su quinta revetlla de Sant Joan lejos de casa, pero no por eso quiere dejar de reivindicar esta festividad que, como destaca el mismo president, se celebra y hermana todos los Países Catalanes. En un vídeo difundido por el Consell per la República, organismo que preside, Puigdemont ha leído el "Manifest per la Flama del Canigó 2022", escrito por el promotor cultural del País Valencià, Eliseu Climent, que recoge con mucho sentimiento que significa esta festividad por los territorios de habla catalana: "Somos un pueblo incombustible que forja paso a paso, obstinadamente, su propio futuro", lee el president.
Països Catalans
"Somos lengua y fuego. Lengua, tenemos una, nacional e innegociable; la que nos une y nos identifica: el catalán de base que fundamenta nuestra cultura, que vehicula nuestras ideas, que da forma a nuestros ideales y que se ramifica en una multitud de fórmulas locales que lo endulzan y lo hacen rico", empieza el manifiesto, haciendo referencia a uno de los elementos clave de esta festividad por todo Catalunya: el fuego "primigenio, purificador y renovador de vida", según lo define. "Y lo festejamos con ancestrales rituales paganos por todos los Países Catalanes. Las Falles de València anuncian la llegada de la primavera. Unos meses antes se habrán encendido las hogueras de Sant Antoni, del cual decimos barracas en los Puertos de Morella y al Maestrat, u hogueras en Mallorca. Los correfocs y los fuegos artificiales, de aparatosa pirotecnia, inundan las calles de pueblos y villas en fiesta de una atmósfera ensordecedora y con el dulce olor de pólvora. Pero sobre todo no podemos olvidar el fuego con que celebramos el solsticio de verano".
Caminar para amar
A continuación, se refiere a Flama del Canigó, que "tendrá que extenderse simbólicamente de Salses a Guardamar y de Fraga hasta Maó, y que será bajada a pie por complicados caminos de montaña, desde la cima de nuestra montaña-emblema, gracias al esfuerzo de nuestra gente. Y es que, a diferencia de otras culturas, las catalanas y los catalanes, del norte y del sur, de poniente e insulares, somos un pueblo que anda|camina". Esta tarde, llegará la Flama del Canigó a Barcelona: su recorrido empezará a las 17 horas en el Camp Nou y llegará hasta la Plaça Sant Jaume una hora más tarde, donde la recibirán los Gegants de la ciutat, els Capgrossos Macers y el Àliga de la ciutat al sonido de la música de la cobla de Sant Jordi-Ciutat de Barcelona.
"Caminamos para conocer y para amar el país. Nuestro presente bebe todavía de aquel excursionismo primigenio que, paso a paso, se fundió con el territorio. Transitarlo lentamente y con la mirada atenta ocurre un rasgo|tiro de cultura. Lo hicieron Mossèn Cinto Verdaguer, Joan Coromines o Josep Maria Espinàs; y Perejaume con su caminar artístico. Caminamos, también, como expresión de una resistencia radicalmente pacífica y revolucionaria", lee el presidente Puigdemont en el vídeo difundido por el Consell per la República, compartido para celebrar esta festividad.
Un pueblo incombustible
En su texto, Eliseu Climent también hace referencia a algunas de las protestas y manifestaciones que han demostrado este carácter de los catalanes: "Somos de paso contundente, marcado, inflexible, que nos une como pueblo en un solo grito, limando divergencias, acercando miradas. Caminar se ha convertido un signo de identidad propio, en un gesto de libertad en el procés hacia la soberanía nacional. Recordad las Marchas por la Libertad, aquellas columnas humanas que entraron a Barcelona en octubre del 2019. Esta imagen lo dijo muchos los. Somos así: lengua y fuego, y al mismo tiempo y si me permitís la irónica paradoja, somos un pueblo incombustible que forja paso a paso, obstinadamente, su propio futuro", concluye el manifiesto.