La aplicación de la ley de amnistía no se está aplicando a todo el mundo y varios condenados podrían ver su situación revisada. Es el caso de los cuatro ultras condenados a 3 años y medio de prisión por haber apaleado a un independentista después de una concentración españolista en la plaza Artós de Barcelona, el 17 de octubre de 2019, en el marco de las protestas por la sentencia del procés. Ahora, la Audiencia de Barcelona pide a los abogados de los 4 condenados, en la Fiscalía y al Ayuntamiento de Barcelona —ejerce de acusación— que se manifiesten sobre si se puede plantear la cuestión de inconstitucionalidad" de la ley de amnistía, ya que, podría vulnerar el principio de igualdad", según detalla El Periódico. El juzgado de lo Penal número 17 de Barcelona impuso una pena de prisión por un delito de lesiones, con las agravantes de actuar con abuso de superioridad y de discriminación por ideología, y la atenuante de reparación del daño a uno de ellos al haber aportado al juzgado una parte de los 10.800 euros de la indemnización impuesta.
"Agresión brutal"
Los atacantes llevaban palos, tubos metálicos y piedras en el momento en el cual sorprendieron al denunciante entre la calle Balmes y Rosellón. El día de los ataques, grupos de independentistas organizados por Tsunami Democràtic, antifascistas y de extrema izquierda habían convocado una protesta en el centro de Barcelona por la sentencia contra los líderes del procés. El mismo día, 250 personas vinculadas a grupos de extramadreta convocaron una protesta a la plaza de Artós de Barcelona. La sentencia apuntaba que en esta concentración se pudieron observar "saludos con el brazo alzado utilizado en el régimen de terror del Tercer Reich alemán", se entonaron "cánticos" del himno franquista "Cara al Sol" y se pudieron ver banderas españolas preconstitucionales con el águila y banderas con la cruz de Borgoña.
Un grupo de ultras que asistieron a esta concentración se desplazaron a la zona donde estaban los grupos independentistas, un total de 10 ultras atacaron a la víctima después de identificarlo como independentista. Según apuntó el magistrado en la sentencia, los acusados "actuaron guiados por su profunda animadversión a la ideología independentista que atribuyeron a la víctima, que fue brutalmente agredida; acción injustificada y merecedora de reproche social y penal". El magistrado también consideraba probado el relato de la víctima, la cual —sostiene— recibió un ataque en grupo y por sorpresa", y los acusados le dieron puñetazos y patadas cuando estaba en el suelo. Además de los golpes por todo el cuerpo, el joven sufrió la perforación del tímpano, que al final no le ha causado déficit auditivo. El juzgado consideró probado que los atacantes hicieron "cinco veces con un palo en la cabeza y el tronco" a la víctima; además, le lanzaron "una piedra en la boca" y "seis puntadas" de las cuales al menos dos impactaron en su cara.