Nueva corrección de la Audiencia de Barcelona al titular del juzgado de instrucción 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, en su cuestionada instrucción del caso Volhov, según una resolución comunicada este viernes y a la cual ha tenido acceso ElNacional.cat. La sección 21 de la Audiencia de Barcelona ha dado la razón al abogado Gonzalo Boye, en nombre de Josep Lluís Alay, que el magistrado no podía haber dictado ninguna resolución desde el febrero de 2024 porque había admitido a trámite su recusación por parte de la jefe de la oficina del president Carles Puigdemont, y ha anulado la resolución del mayo pasado en la cual el juez se autoenmendaba y dejaba sin efecto resoluciones dictadas en marzo, cuando estaba recusado por prevaricación por Alay.

Esta es la segunda vez que la sección 21 de la Audiencia de Barcelona reprende al magistrado Aguirre por el caso Volhov. El diciembre pasado le ordenó detener la investigación sobre la supuesta injerencia rusa al independentismo catalán, que había seguido, aunque tenía la orden del tribunal de pararla. El tribunal indicó que cometía "fraude de ley" al no hacerle caso —que es su órgano superior— y haber seguido la investigación en una nueva pieza, donde por primera vez implicó a los presidents Artur Mas y Carles Puigdemont.

Querella sin respuesta seis meses después

Paralelamente a esta corrección de la Audiencia de Barcelona, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) tiene pendiente de resolver todavía si admite a trámite la querella contra el juez Aguirre por prevaricación presenta por Puigdemont, Alay y Boye hace ya seis meses. La querella se presentó el 3 de julio pasado, la Fiscalía pidió que no se admitiera a trámite el octubre pasado, mientras el juez Aguirre tiene aprobada la jubilación en cinco días, el 15 de enero.

"Prohibida toda resolución"

En caso corregido ahora por la Audiencia, el juez Aguirre desestimaba el 13 de marzo pasado unos recursos de investigados contra la prórroga de la instrucción de la pieza 7 (donde están acusados Alay y dos agentes de los Mossos, investigados por mirar si estaba registrado en el sistema policial en el 2020); la pieza principal (el caso Diputación) y la pieza de Volhov.

Al ver su irregular actuación, el magistrado dictó una nueva resolución, el 21 de mayo de 2024, que dejaba sin efecto las de marzo. Ahora, la Audiencia de Barcelona anula esta resolución de mayo y recuerda al juez Aguirre que no podía hacer nada recusado, y que lo tenía que hacer su sustituto.

"El magistrado no tenía competencia para dictar ninguna resolución y le estaba prohibido intervenir a la causa, ni siquiera con el fin de enmendar errores advertidos, como bien señala el recurrente, como el Ministerio Fiscal, ya que la prohibición es absoluta, con la única excepción de la práctica de diligencias urgentes, que no es el caso," afirma al magistrado Joan Ràfols, ponente de la sección 21 de la Audiencia.

En cuanto a la investigación de Alay y los dos agentes de los Mossos, el juez Aguirre admitió que había perdido la resolución que daba por cerrada la investigación. Ordenó rehacerla y nada más se sabe. Sus abogados hace tiempo que solicitaron que se archive porque no han cometido ningún delito.