La Audiencia Provincial de Madrid respalda la investigación a Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez, por tráfico de influencias y corrupción en los negocios a raíz de la denuncia que presentó hace más de un mes Manos Limpias. El tribunal ha rechazado el recurso que interpuso la Fiscalía contra la apertura de diligencias esgrimiendo que el escrito original del sindicato ultra expone “datos objetivos suficientes que legitiman el inicio de la investigación”. El auto sostiene que para admitir una denuncia “basta la verosimilitud” y “la mera posibilidad fundada”, dado que lo contrario llevaría al “absurdo de solo poder incoar diligencias de investigación por hechos que contengan una alta probabilidad de condena”, cosa que “distorsionaría” la función investigadora de la fase inicial del proceso. Asimismo, el auto es muy crítico con el recurso que presentó la Fiscalía: “La pretensión del Ministerio Fiscal de impedir toda investigación en este delicado campo es inusual y podría llevar a crear lagunas de impunidad en toda actividad delictiva donde la delimitación del comportamiento penalmente relevante no siempre es fácil de establecer”, señala. E insiste que, inicialmente, “debe bastar una sospecha fundada en datos objetivos y verificables” para abrir una investigación.

El auto, firmado por los jueces María del Rosario Esteban, Jesús Gómez-Angulo y Enrique Jesús Bergés, sostiene que Begoña Gómez “podría estar amparándose en su condición de esposa del presidente del Gobierno para ofrecer su influencia personal de recomendación en la adjudicación de sustanciosos contratos de adjudicación pública en favor de determinadas empresas que, al tiempo, le prestan soporte, ventaja o beneficio en el desarrollo exponencial de su carrera profesional”. Concretamente, señala a las ayudas a la UTE formada por Innove Next y la Escuela de Negocios The Valley: en este caso, los magistrados estiman que en la denuncia presenta “datos objetivos suficientes que legitiman el inicio de la investigación” y proporciona “indicios objetivos que apuntan a la intermediación en la concesión de subvenciones en las que podría haber mediado algún tipo de contraprestación”. Una “actividad que legitima una investigación”, remachan.

Eso sí, los magistrados consideran que la denuncia de Manos Limpias tiene un contenido “algo inconexo” y cuestionan las acusaciones referidas al rescate de Globalia. Consideran que, en este tema, el relato es “inverosímil” y contiene “datos erróneos”, ya que la vinculación de Begoña Gómez con los hechos es una “simple conjetura más allá de llamativas coincidencias temporales y personales”.

 

“La pretensión del Ministerio Fiscal podría llevar a crear lagunas de impunidad”

El auto de la Audiencia de Madrid también cuestiona duramente la pretensión de la Fiscalía de archivar las diligencias. “No puede estimarse el recurso, pues ni los hechos contemplados son manifiestamente falsos, ni cabe negar de plano la apariencia delictiva, sin contar con la investigación que aporte el conocimiento de todas las circunstancias concurrentes”, arguyen los magistrados. Y disparan contra la “pretensión” del Ministerio Fiscal de “impedir toda investigación” en este “delicado campo”, que consideran que es “inusual y podría llevar a crear lagunas de impunidad en toda actividad delictiva donde la delimitación del comportamiento penalmente relevante no siempre es fácil de establecer y donde la obtención de fuentes de pruebas es compleja”.

El auto argumenta que “el fin y las garantías del procedimiento están diseñadas en sentido contrario”, ya que “al inicio debe bastar una sospecha fundada en datos objetivos y verificables, que tendrá que ir decantándose y superando los filtros establecidos para, en su caso, llamar a alguien a declarar como investigada, posteriormente acordar la continuación del procedimiento y finalmente poder condenar”. En cambio, si una vez “verificadas las comprobaciones e investigaciones precisas”, la hipótesis se diluye “procederá acordar el archivo inmediato”.

En su recurso, el Ministerio Fiscal argumentaba que no hay indicios de delito que justifiquen la apertura de un procedimiento penal y señalaba que el auto “carece de cualquier razonamiento jurídico” sobre si los hechos relatados “reúnen, al menos indiciariamente, los elementos de los tipos penales”. Además, apuntaba a que el escrito de Manos Limpias se limita a considerar que los hechos “merecen ser investigados” y pretende que se inicie una investigación sustentada en “meras hipótesis o en la pura y simple sospecha”.

Manos Limpias reconoció que la denuncia podría basarse en noticias falsas y la Guardia Civil no encontró ningún indicio de delito

A todo ello, poco después de que el juez admitiera a trámite la denuncia de Manos Limpias, el sindicato ultra reconoció en un comunicado que su escrito puede estar basado en noticias falsas. Lejos de cualquier rectificación, la entidad se lavó las manos y esgrimió que “será el juez quien tendrá que comprobar si estas informaciones periodísticas son ciertas o no”. El texto sostenía que, después de ver lo que algunos medios publicaban sobre Begoña Gómez y, habiendo constado que “la Fiscalía no actuaba de oficio, aunque las noticias mencionadas llevaban semanas publicadas”, Manos Limpias decidió interponer la demanda.

Además, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil no encontró ningún indicio de delito de tráfico de influencias en los negocios de Begoña Gómez. Los investigadores reconocían que la mujer de Sánchez no tuvo ninguna implicación ni en el rescate de Air Europa en plena pandemia por el Gobierno ni tampoco recibió ninguna subvención pública. Así pues, el informe de la UCO contradecía toda la información que aportó Manos Limpias en su denuncia.