Ya estamos todos. A estas alturas, casi todas las partes implicadas en la guerra reabierta en el Partido Popular ya han comparecido en público para intentar aclarar la cuestión o para atacar a sus rivales. Faltaba una persona: el director de Mira, la agencia de detectives con la cual presuntamente contactó el ejecutivo nacional del partido. La cadena española 7NN ha conseguido audios del investigador privado, Julio Gutiez, donde confirma el presunto encargo del PP. Un contacto que el secretario general de la formación, Teodoro García Egea, ha negado rotundamente este jueves en rueda de prensa.
Gutiez afirma en estos audios, compartidos en las redes sociales, que lo intentaron "contratar algunas personas vinculadas a alguna empresa del PP, o donde gobierna el PP". Sin embargo, negó el encargo: "Les dije que el trabajo que me querían encargar era ilegal por los datos que solicitaban. No entré mucho más en el interés legítimo". "Pero el primero que les dije es que era ilegal y que yo no hacía ninguna investigación ilegal", añade. De hecho, el detective concreta que no se puede hablar ni de investigación, ya que solo "querían unos datos muy concretos de la Agencia Tributaria y de un banco". "Me negué y aquí quedó la historia", apunta. Pero la cosa no acaba aquí. Una periodista le llamó para confirmar la información que le llegaba desde Génova sobre que lo habían intentado contratar y que se había negado. "Solo dije que ni confirmaba ni desmentía", explica. Es decir, que no dijo en ningún momento quién lo quiso contratar. "Nunca en mi vida he filtrado a quien era mi cliente. Nunca he filtrado una investigación. He sido ocho años imputado por un señor para no dar en un juzgado a un juez a quién era mi cliente, pidiéndome ocho años de prisión y 800.000 euros de indemnización", aclara.
Aun hay más. El diario El Mundo ha tenido acceso a una conversa telefónica entre el presidente de la Empresa Municipal de Vivienda (EMV), Álvaro González, y el mismo Gutiez. "Lo llamaba por si nos podíamos ver para contrastar una información que me ha llegado", dice González, sin dar más datos por teléfono. El motivo de la llamada era porque había conocido el hecho de que trabajadores de su empresa se habían puesto en contacto con la empresa Mira para realizar un encargo concreto.
De momento, el PP niega cualquier tipo de contacto con la agencia de detectives. En la misma rueda de prensa donde ha anunciado la apertura de un expediente informativo a Isabel Díaz Ayuso, García Egea ha desmentido tajantemente que nadie de su partido haya contactado con ninguna empresa de investigadores privados, como podría ser Mira, tal como señalaban las informaciones publicadas. Asimismo, ha negado que se haya elaborado "ningún dosier" sobre Ayuso, como ha anunciado la misma presidenta madrileña. "Si alguien lo hubiera hecho, lo habría cesado inmediatamente", ha declarado el secretario general del PP. En cualquier caso, parece que García Egea tendría que volver a comparecer para explicar estos audios y la dimisión de Ángel Carromero, hombre fuerte de Pablo Casado y de José Luis Martínez Almeida.
Y es que a pesar de que el PP teóricamente no ha hecho nada y que todo es una invención, la guerra reabierta en el PP ya se ha cobrado a la primera víctima política. El coordinador general de la alcaldía de Madrid, Ángel Carromero, ha presentado su dimisión por los supuestos contactos con la agencia de detectives Mira, dirigida por el mencionado Julio Gutiez. Unos contactos que se habían hecho para investigar presuntamente al hermano de la presidenta madrileña, Tomás Díaz Ayuso. Carromero, próximo a Casado, García Egea y Almeida, es quien aparece a las informaciones periodísticas como la persona que activó la investigación de documentos para probar una comisión supuestamente irregular del hermano de Ayuso para desactivar sus pretensiones políticas de reemplazar al actual líder al frente del partido.