La Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo, que preside el diputado de Cs Adrián Vázquez, puso ayer en marcha el procedimiento del suplicatorio para levantar la inmunidad de los eurodiputados de Junts, Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí, y ya ha recibido un escrito denunciando incumplimiento de las regles de la propia comisión y de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
La razón es que a los tres se les ha asignado el mismo ponente, cuando los principios de actuación de la comisión fijan en su artículo 6 que "la comisión designará un ponente para cada expediente de inmunidad" y en el artículo 8 especifica que se designará por turno entre los grupos "en igualdad de condiciones".
Ponente de extrema derecha
No obstante, a los tres se les ha asignado un mismo ponente sin darles ninguna motivación que lo explique. Su caso ha quedado en manos del eurodiputado búlgaro Angel Dzhambazki, del cual destacan en el Parlamento Europeo intervenciones contra los gitanos, el colectivo LGTBI o el posicionamiento contra la convención de Estambul sobre violencia de género.
Comín advierte que se le asignó el mismo ponente que el suplicatorio inmediatamente anterior, que era el de Puigdemont, y Ponsatí advierte que ella ni siquiera era miembro de la Eurocámara cuando se les asignó a sus compañeros de grupo el ponente, pero que, cuando con la marcha de los diputados británicos a raíz del Brexit entró en el Parlamento y se planteó un nuevo suplicatorio específicamente contra ella, el presidente de la comisión anunció que habían decidido asignarle el mismo ponente que a los otros dos eurodiputados de JxCat.
Además, recuerda que los cargos por los cuales se pide el suplicatorio a cada uno ni siquiera son los mismos.
Precedentes
Ponsatí y Comin advierten que en el pasado la comisión ha designado diferentes ponentes para cada eurodiputado a quien se pedía un suplicatorio, con independencia que diferentes expedientes surgieran de la misma causa o guardaran conexión entre ellos. Ponen como ejemplo el suplicatorio solicitados en abril del 2017 contra dos eurodiputados franceses por una misma causa y con la misma fecha, a los cuales se les designó ponentes distintos.
Tanto Ponsatí como Comín reprochan que esta decisión adoptada por la comisión que preside Vázquez contradice los principios de funcionamiento de este órgano. Además, añade que no se les ha dado ninguna motivación para esta decisión lo cual incumple la Carta de Derechos Fundamentales de la UE que en su artículo 41.2.c advierte sobre "la obligación que tiene la Administración de motivar sus decisiones".
La comisión puso en marcha los procedimiento del suplicatorio este lunes con la exposición y debate del informe del ponente. Los tres eurodiputados han sido citados para el día 7 de diciembre para intervenir en audiencia donde podrán hacer una exposición de 15 minutos y responder las preguntas de los eurodiputados que forman parte de la comisión. Las sesiones sobre el suplicatorio son a puerta cerrada.
Las alegaciones de los eurodiputados sobre vulneración de derechos o incumplimientos de la normativa resultan especialmente relevantes teniendo en cuenta que ya han expresado la voluntad de recurrir al Tribunal de Justicia de la UE en caso que el suplicatorio prospere. El argumento que esgrimirán es que el suyo es un caso de persecución política en que se han vulnerado sus derechos.