Más catalán. Con el anuncio del acuerdo sobre el catalán en las escuelas que se hizo público este martes por la tarde, ya empieza a cuestionarse qué pasará a partir de ahora en los centros. La nueva ley, que acabará de tramitarse en el Parlament el viernes, con toda previsión, tiene como objetivo defender el modelo actual de inmersión lingüística, según afirman las formaciones independentistas de Esquerra Republicana y Junts. Además, también quiere hacer caer la responsabilidad sobre la Conselleria de Educación, para no dejar desprotegidas las direcciones de los centros ante la sentencia del TSJC que obliga a impartir un 25% de clases en castellano. A pesar de las discrepancias de estos puntos con el PSC (que ve el castellano como nueva lengua vehicular) y la CUP (que afirma que los maestros todavía serán vulnerables), el conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, ha querido insistir en esta línea que celebra ERC y Junts sobre la nueva ley.
"Lo que hacemos hoy es un acuerdo de país para afianzar el modelo de escuela catalana y proteger jurídicamente las direcciones, los maestros y los proyectos lingüísticos ante una sentencia que es una aberración pedagógica y no tiene ningún tipo de sentido", ha lanzado durante una interpelación en el pleno del Parlament. Solo un rato antes, la cámara catalana ha celebrado la primera votación del acuerdo sobre el catalán, con más de un centenar de votos a favor. Así, ha remarcado que con esta medida se podrá garantizar que todo el alumnado tenga competencias orales y escritas de catalán y castellano cuando acabe la educación obligatoria, sin imposiciones porcentuales. "Y lo hacemos aplicando la pedagogía", ha dicho.
Por lo que hace a saber sobre quién recaerá la responsabilidad ante los tribunales, ha garantizado que recaerá en su Departamento. "Asumiremos toda la responsabilidad ante la legalidad de los proyectos educativos, aprobando y validando los proyectos lingüísticos de los centros educativos". Y es que con la nueva legislación, cada escuela presentará su propio proyecto en que explicará de qué manera usará el catalán y el castellano en las diferentes asignaturas y en los diversos programas educativos, según las necesidades específicas. Posteriormente, será la Conselleria la que dará el visto bueno a este programa.
"Queremos que todo el alumnado viva en catalán"
Más allá, también ha avisado de que Educación hará un seguimiento de estos proyectos lingüísticos con el fin de confirmar que se aplican los proyectos lingüísticos aprobados a cada centro. "Tienen que tener un reflejo real en nuestras aulas. Nuestros maestros no pueden elegir la lengua en que dan clase", ha advertido, ante la realidad de que eso ya es así en muchas escuelas en Catalunya. Con todo, tiene como objetivo hacer frente a una bajada en el uso del catalán durante los últimos años. "Lo que hacemos es reconocer esta situación indeseada y desplegar un plan de impulso en los centros educativos", ha explicado. Y no solo eso, sino que también ha indicado cuál es el objetivo de su Conselleria: "Queremos que todo el alumnado viva en catalán, ame el catalán, y tenga un uso racional del catalán, ya que es lengua que une, da cohesión social, igualdad de oportunidades y equidad".