En medio de todo el lío por la aprobación del decreto anticrisis del gobierno de Pedro Sánchez, Isabel Díaz Ayuso también ha querido decir la suya. Marcado por el escándalo del CatalanGate, que ha hecho que ERC se haya acabado sumando a Junts y la CUP y haya votado en contra, el gobierno de coalición acabará aprobando por|para la mínima su propuesta gracias al apoyo de EH Bildu. También se había especulado con la posibilidad de que el PP se abstuviera en lugar de votar en contra, algo que finalmente no ha acabado sucediendo. Por eso, Isabel Díaz Ayuso ha defendido la negativa de su partido, sosteniendo que si el Gobierno no habla con el PP "es imposible que después les pida cosas a cambio". Yendo más allá, se ha fijado en Bildu y ha defendido que "en esta vida, cuando tenemos que posicionar, yo creo que donde esté ETA es mejor no estar". Así lo ha dicho en una visita a los laboratorios Ynsadiet después de conocer la decisión de los populares sobre la votación en el Congreso. Durante los días previos a esta aprobación, el PP insistía en reclamar mayores bajadas de impuestos y la deflactación del IRPF, reclamando que el decreto se tramitara como proyecto de ley, ya que así se pueden introducir modificaciones. Aunque La Moncloa acabó accedido a esta demanda, no aceptó las medidas sobre los tributos.
Contra los "golpistas" a la comisión de secretos
Las declaraciones de Ayuso no se han acabado aquí y también ha querido tratar el escándalo del Catalan Gate, defendiendo que el CNI tiene que poder movilizar todos los medios legales a su alcance para defender España de una insurrección como la que ha tenido lugar en Catalunya". Estas declaraciones se parecen mucho a las de Macarena Olona, la polémica diputada ultra y más que posible candidata de Vox a las elecciones andaluzas designada por el mismo Abascal, que opinaba en el hemiciclo que a los independentistas se les había espiado poco. También con la de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que justificaba el espionaje.
"Creo que es una torpeza que al final consigamos dar todavía más motivos a aquellos, que, con un lenguaje victimista, no están consiguiendo nada. Me parece que es un error grave", ha dicho durante su intervención sobre el espionaje a líderes independentistas con el software Pegasus y publicado en The New Yorker. También se ha referido al hecho de que Mertixell Batet haya activado la inclusión de Junts, ERC y Bildu dentro de la comisión de secretos oficiales: "meter a los golpistas en la comisión de secretos oficiales es hacer trampas del Legislativo para hacer contento al Ejecutivo y perjudica los intereses de España". Fuentes del CNI también lo han lamentado, siguiendo la línea de Ayuso, que cree que esta decisión deja España "como un país poco fiable y cada vez será más difícil recibir información imprescindible de otras agencias de seguridad".