La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quiere buscar bronca. Ha vuelto a hacer unas declaraciones muy duras contra Catalunya. Ayuso ha cargado, de nuevo, contra el nacionalismo catalán: "La Generalitat es una administración autonómica que se ha inventado una nación". Las palabras de la dirigente popular han estado a propósito del asunto de la lengua en las escuelas catalanas. De hecho, sobre el porcentaje del catalán en las aulas ha asegurado que "los catalanes ven negado su derecho constitucional a estudiar en el idioma que comparten 600 millones de almas en todo el mundo". Ayuso ha aprovechado el discurso de clausura del 17.º Congreso Autonómico del Partido Popular en Madrid para sacar a pasear sus palabras más severas contra los catalanes, constatando así la línea más dura e irreverente que ella lidera dentro del PP.
Ayuso no ha tenido bastante con decir ante un congreso lleno a tope de afiliados y simpatizantes del PP que la nación catalana no existe, sino que también ha asegurado que "el nacionalismo es propio de las no naciones". De hecho, bajo su opinión, el nacionalismo catalán "se ha convertido en una fábrica de expulsar jóvenes y empresas". Los discursos de la presidenta madrileña distan, sobre todo en las formas, de los del presidente del Partido Popular, Alberto Núñez-Feijóo. Prueba de esto es que el coordinador general del partido y hombre próximo a Feijóo, Elías Bendodo, reconoció que España "es un Estado plurinacional". Unas palabras que se alejan mucho del discurso agresivo de Ayuso. Bendodo quiso explicar cómo encaja Catalunya en esta nueva visión del PP: no es una nación dentro de España, pero sí una nacionalidad del Estado español. "Como cualquier otra comunidad autónoma", declaró en una entrevista de ElMundo. Hace falta decir que Feijóo, el día siguiente que Bendodo declaras en favor de un Estado plurinacional, salió a cerrar rápidamente el tema: "Es evidente que España no es un estado plurinacional, es una obviedad, y el debate no existe, y si se quiere aprovechar un error, adelante, pero ha sido rectificado".
Ayuso, consolidada como dirigente madrileña
La crisis interna del PP que le costó la dimisión a Pablo Casado finalmente ha culminado con el triunfo que Isabel Díaz Ayuso tanto anhelaba: la presidencia del PP de Madrid. El Partido Popular celebra este fin de semana en la capital española el congreso extraordinario que ha escogido de la nueva líder del PP a la Comunidad de Madrid con el 99% de los votos, cargo que hasta ahora ocupaba Pío García Escudero. Precisamente, Díaz Ayuso era la única dirigente popular autonómica que no contaba con la presidencia del partido a su comunidad, y su ambición para alcanzar el cargo fue un elemento clave en su pugna con Casado. El expresidente del partido no ha sido invitado al acto.
Ayuso ayer estuvo acompañada por los presidentes autonómicos del PP, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra; el coordinador general del PP, Elías Bendodo, y el subsecretario institucional del PP, Esteban González Pons. Hoy, en cambio, ha sido acompañada por el presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, a quien Ayuso ha agradecido su confianza "sin tutelas", al mismo tiempo que le ha trasladado que el PP madrileño es su "casa". "Es tal la confianza en que ha depositado en nosotros que cada vez que ha hablado del congreso sólo ha preguntado "en qué puedo ayudaros", ha declarado. A pesar de la escalada de tensiones cerca la crisis interna del partido, Ayuso ha aprovechado su victoria para escenificar la reparación de las relaciones con Almeida. "Al comité de dirección habrá, el primero, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida," ha expresado Ayuso. Ha indicado que "José Luis" y ella no son "dos mitades". "Como todo el mundo sabe, por cuestión organizativa él encabezó una lista electoral y yo otra en 2019. Fuimos dos listas, pero hoy somos un mismo equipo", ha señalado