La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado que la capital española "no deja de recibir catalanes y empresarios" que buscan la "libertad" que les da su gobierno en materia fiscal. En una entrevista en La Vanguardia este domingo, Ayuso también ha defendido a capa y espada su estrategia para hacer frente a la pandemia del coronavirus y ha celebrado que Madrid "se haya convertido en un ejemplo para otras ciudades europeas".
"Infierno fiscal"
Con respecto al pacto del Gobierno con ERC de cara a los presupuestos que contempla armonizar los impuestos de los territorios, causando que Madrid pagara más, Aysuo ha lamentado que Sánchez quiera "subir la mayoría de los tributos". La presidenta ha amenazado al ejecutivo central asegurando que "será la peor pesadilla de quien quiera tocar el bolsillo de los madrileños" y ha dicho que "los nacionalistas y las comunidades socialistas llevan al infierno fiscal"
"Si tiene que haber una política fiscal común en España, que sea la nuestra, que es la que mejor ha funcionado: armonizar a la baja los impuestos", ha pedido.
En este sentido, la popular ha explicado que su Comunidad ve "cómo llegan empresarios y catalanes" que buscan "libertad" y "que los dejen en paz".
El coronavirus, "controlado"
"A estas alturas la pandemia está controlada en Madrid. Los indicadores apuntan que seguiremos bajando, pero no podemos confiarnos. Hemos podido contener la curva sin tener que hacer más daño al sector privado. La economía también es salud. Nunca hay que cerrarlo todo. Las medidas traumáticas de cierres y confinamientos excesivos provocan depresiones y suicidios", ha afirmado la presidenta.
Además, Ayuso ha asegurado que su gobierno ha sido transparente con las cifras y ha acusado al Gobierno de "querer vender la gran mentira que manipulábamos las cifras".
Díaz Ayuso en un acto en Barcelona este sábado / Sergi Alcázar
"Catalunya me importa"
La popular ha evitado valorar la nueva estrategia del Departamento de Salud para hacer frente a la segunda ola y ha dicho que respeta todas las decisiones: "A mí, Catalunya me importa. Si puedo dar ideas para que mejoren, lo haré. No me oirán hacer ningún comentario sobre otras comunidades ahora que están peor, al contrario de lo que hicieron conmigo", ha dicho.
La relación con el Gobierno
Con respecto a la relación con el Gobierno, la presidenta ha asegurado que no hay "una guerra Sánchez-Ayuso porque significaría que los ciudadanos son nuestros rehenes", pero ha denunciado que Sánchez "haya cargado contra Madrid". "Tenía que gestionar una pandemia para la cual apenas hemos tenido ayuda y las decisiones de gobierno perjudicaban muchas veces al mío. Fue un abuso y en lugar de ir juntos, nos impusieron un modelo contrario al nuestro", ha explicado.
Sin embargo, Ayuso ha afirmado que ahora, en las últimas semanas, la situación entre los dos líderes se ha normalizado y celebra que dejen más libertad a la Comunidad para gestionar la pandemia. "Lo que no es normal es que quieran imponer a un modelo sanitario, fiscal o educativo nefasto por interés electoral y pretender que aquí nadie diga nada. El silencio en estos casos no es ni moderación ni colaboración sino desistimiento de funciones," ha reiterado. En este sentido, ha criticado que el Gobierno "no tenga estrategia y esté desaparecido".