El presidente de Aragón, Jorge Azcón, conocido por su odio hacia la lengua catalana y todo lo que le recuerde a Catalunya, ha tardado muy poco en reaccionar a la nueva propuesta de referéndum que hizo este martes Pere Aragonès. Y lo ha hecho reclamando la participación de los ciudadanos de la autonomía que preside desde el mes de junio, cogiendo el relevo del igualmente catalanófobo Javier Lambán, en un referéndum de autodeterminación para decidir sobre la independencia de Catalunya. Tras rechazar la posibilidad de consultar a los catalanes por ir en contra de la Constitución, aunque Aragonès señala el artículo 92 de esta misma para conseguir su encaje constitucional, Azcón ha dejado claro que en caso de que se hiciera, se tendría que preguntar a todos los habitantes del Estado, empezando por los de Aragón: "No tiene sentido que se pida a una parte y no se nos pregunte a todos".
Un independentismo con alas por culpa de Pedro Sánchez, según Azcón
"Si lo que se planteará es si un referéndum sí o un referéndum no, los aragoneses también queremos opinar. Y nuestra opinión es clara, nítida y cristalina: va contra todo aquello que es España, lo que es Aragón, contra la constitución y contra el Estado de derecho", ha resuelto el presidente aragonés, mostrando su rechazo claro hacia un referéndum de autodeterminación. Aparte de cargar contra el independentismo, Azcón no ha perdido la oportunidad de hacerlo contra Pedro Sánchez y sus acuerdos con Junts y Esquerra, que según él, y a diferencia de lo que defiende al PSOE, en lugar de calmar las aguas en Catalunya solo ponen más leña al fuego, como demostraría la nueva propuesta de Aragonès para un referéndum: "No es reconciliación, sino dar alas al independentismo", ha afirmado el presidente aragonés en referencia a la ley de amnistía, bloqueada en el Senado desde hace semanas.
Polémica por la ley de memoria democrática
Estas palabras de Azcón tienen lugar días después de que el presidente de Aragón decidiera derogar la ley de memoria democrática de la autonomía, impulsada en legislaturas anteriores por los socialistas. El ministro del ramo, Ángel Víctor Torres, describió esta decisión como inconstitucional, unas palabras que no han gustado nada a Azón: "Para el gobierno de Pedro Sánchez la amnistía es constitucional, pero la derogación por las Cortes de Aragón, de forma democrática, de una ley es inconstitucional", ha ironizado. Yendo más allá, ha acusado al PSOE de recorrer a Franco cuando pasa por un mal momento: "No cuela, el ministro no quiere hablar de las conversaciones que tuvo con el señor Koldo o que pasó con las mascarillas cuando era presidente de Canarias y tiene que hablar sobre aquello que habla el PSOE cuando está pasando un mal momento: 'Franco está vivo'".