La bandera española, que, entre la catalana y la europea, corona la fachada del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), en el paseo Lluís Companys de Barcelona, cuelga, literalmente, de un hilo. Un hilo que apenas la aguanta, atado al mástil, como se puede apreciar en la imagen.
El fuerte viento de esta mañana ha hecho temer a muchos de los concentrados ante la sede judicial para manifestarse contra del juicio a Artur Mas, Joana Ortega y Irene Rigau por la consulta participativa del 9-N que la enseña estatal podría caer de un momento a otro.
Por el contrario, la estabilidad de la bandera catalana parece, aparentemente, más asegurada.
Después de que el viento haya jugado una jugarreta en la bandera española y la europea que ondea en el TSJC, los técnicos lo han acabado bajando y están izando otra.
Mientras la volvían a colgar, toda la ciudadanía concentrada ante el TSJC ha silbado y ha gritado en contra de que la volvieran a colocar.
La nueva bandera española, izada hace pocos minutos, se ha vuelto a enredar por el viento.