"Estamos en España". Este es el único argumento que se ha dado desde el PSOE para justificar la aparición de una bandera española gigante en la sede del partido en la calle Ferraz, en Madrid. Esta bandera de grandes dimensiones está en vertical y no tiene mástil, porque cuelga de la fachada, la longitud es exactamente de dos plantas del edificio. Lleva aquí desde el último día del Comité Federal de los socialistas, cuando militantes y simpatizantes se movilizaron para pedir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que continuara al frente del ejecutivo después de los cinco días de reflexión que se tomó.
Fuentes del PSOE explican, en declaraciones a El Confidencial, que la bandera la han decidido colgar porque "estamos en España", y es más, añaden que "el PP también puso la suya por primera vez en algún momento", en referencia a la bandera española de la sede de los populares en la calle Génova de Madrid. Además, una parte de los socialistas ha protestado y ha apuntado que no entiende por qué los símbolos nacionales se los tiene que apropiar la derecha.
¿Qué significa la bandera?
Hay quien interpreta este gesto de lucir la bandera a la proximidad de las elecciones europeas del próximo 9 de junio y también al hecho que cuando se colgó (el último día del Comité Federal de los socialistas), faltaban dos semanas para las elecciones catalanas del domingo pasado 12 de mayo, que las ganó socialista Salvador Illa. Ahora bien, la idea de los socialistas es que la bandera esté en la fachada de la sede durante un tiempo indeterminado, es decir, que ya se quede.
También hay quien piensa que es una manera de marcar distancia con el independentismo después de los comicios del 12-M. Precisamente este viernes al mediodía, el presidente español ha rechazado "completamente" que los socialistas apoyen al candidato de Junts, Carles Puigdemont, para que sea el nuevo presidente de la Generalitat, ha señalado que no tiene mayoría y, por lo tanto, considera que "todos los caminos conducen a Salvador Illa", el candidato del PSC. En una entrevista en La Sexta, Sánchez ha considerado que Puigdemont "tiene que asumir la realidad" que indica que no hay una mayoría independentista en el Parlament de Catalunya, y, por lo tanto, tendrá que darse cuenta de que no tiene opciones y que el único candidato viable para presidir Catalunya es Illa. "Le costará más o menos tiempo, pero al final la realidad es la realidad y es que no le dan los números para ser elegido presidente", ha señalado el jefe del Ejecutivo.