Un centenar de policías españoles y guardias civiles se han manifestado este miércoles en las puertas del Congreso de los Diputados para protestar contra la proposición de ley que delega a Catalunya las competencias en inmigración. Una pequeña delegación de diputados del PP encabezados por Alberto Núñez Feijóo y de Vox capitaneados por Javier Ortega Smith han participado en un baño de masas con los sindicatos y asociaciones policiales agitados contra las nuevas funciones que tendrán los Mossos d'Esquadra si se acaba aprobando la norma. Los manifestantes han exhibido dos muñecos: uno de la Guardia Civil con una careta de Pedro Sánchez y otro de un policía del CNP con una careta de Carles Puigdemont.
El líder de los populares ha defendido que el acuerdo entre el PSOE y Junts es "malo para Catalunya, no solo para el resto del Estado". Y ha argumentado que "la seguridad nacional" está directamente ligada con el control de las fronteras. De manera que la estrategia de "desmantelar la seguridad nacional es mala para todos los territorios". "Tenemos que detener el desmembramiento" del Estado, ha defendido Feijóo en declaraciones a su llegada en esta manifestación.
Ortega Smith, en declaraciones a los periodistas que han salido a cubrir esta manifestación a las puertas de la cámara baja, ha acusado a Pedro Sánchez de vender "la soberanía nacional a cambio de los votos" de Junts per Catalunya. El diputado de la formación de extrema derecha ha hecho un repaso de las cesiones que el presidente del Gobierno ha entregado al independentismo durante los últimos años, y ha lamentado que la última decisión haya sido "pagarlo con la seguridad de los españoles y los policías". "Las fronteras son la base esencial de la soberanía", ha insistido el diputado de Vox.

Compromiso de Feijóo de revertir la delegación si llega a la Moncloa
Precisamente esta semana, Alberto Núñez Feijóo se reunió en el Congreso de los Diputados con una quincena de sindicatos y asociaciones de la policía española y la Guardia Civil para trasladarlos su apoyo después de que la semana pasada PSOE y Junts per Catalunya cerraran el acuerdo definitivo para delegar a la Generalitat las competencias en inmigración.
Durante el encuentro, el líder del PP les prometió revertir esta delegación si llega a la presidencia del Gobierno y combatirla en los tribunales. La ley —que tendría que ser aprobada por el Congreso— contempla que a partir de ahora los Mossos d'Esquadra se encargarán de gestionar la seguridad de puertos, aeropuertos y otras infraestructuras críticas de Catalunya. La policía catalana, de la misma manera, colaborará con los otros dos cuerpos policiales españoles en las tareas de control fronterizo; el papel que desarrollarán exactamente los Mossos lo determinará la Junta de Seguridad de Catalunya, presidida por el president de la Generalitat.