Los presidentes autonómicos del PP se van de Santander con las manos vacías, igual que después de sus reuniones bilaterales con Pedro Sánchez en la Moncloa. Durante la Conferencia de Presidentes, los once barones populares han expresado su rechazo a la financiación singular para Catalunya y han puesto en duda la condonación de la deuda que el presidente español ha anunciado que se abordará en un Consejo de Política Fiscal y Financiera en enero. El mensaje al unísono del PP ha sido exigir que se ponga encima de la mesa la reforma del sistema de financiación en su conjunto y no limitarse a un “parche”, una “escenificación”, un “caramelo envenenado”, un “cebo” o unas “migajas” a través de la condonación de la deuda. En sus comparecencias posteriores a la cumbre, todos los presidentes autonómicos populares han cuestionado el camino trazado por la Moncloa y han restado importancia a salvarles de parte de su deuda autonómica si no se reforma el sistema al completo. “El Consejo de Política Fiscal y Financiera debe ser convocado sin ninguna duda de forma urgente, pero para abordar el modelo de financiación, todo lo demás es secundario”, ha apuntado Alfonso Rueda. El presidente de Galicia ha exigido “abordarlo cuanto antes” y ha criticado que circunscribirlo a la condonación de la deuda es “absolutamente insuficiente” y “no prioritario” frente a lo “inaplazable”.

Condonar la deuda del País Valencià después de la DANA

Una de las reivindicaciones que hace el PP es que la condonación de la deuda sirva para aliviar la situación en el País Valencià, que todavía sufre las consecuencias de la DANA. Ahora bien, es una solución de mínimos: “Condonar la deuda a Valencia es como que el banco te perdone una mensualidad de hipoteca”, ha resumido Carlos Mazón. El presidente valenciano ha reprobado que Sánchez no les haya explicado “nada” y no haya adquirido ningún compromiso. “No nos ha contestado cómo se pretende conjugar la multilateralidad bilateral o la bilateralidad multilateral”, ha denunciado. “Estaríamos muy agradecidos de conocer los profundos caminos de este sendero”, ha añadido.

Una de las veladoras de esta posibilidad es Isabel Díaz Ayuso. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha tildado la condonación de propuesta “profundamente desleal e insensata” que perjudica a quienes “hacen los deberes” y no incurren en déficit y ha defendido que si se debe condonar alguna deuda debe ser la de la Generalitat Valenciana, que vive una “situación insostenible” por la catástrofe que ha sufrido y porque “heredó una deuda que les imposibilita para pagar las cosas más necesarias”. El presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla, se ha alineado con este camino: “Yo estaría de acuerdo en ayudar a la Comunidad Valenciana y en centrar todos los esfuerzos en ella: va a tener un impacto económico muy fuerte, un gasto brutal”. Y se ha añadido a ella Alfonso Rueda: “Hay algunas comunidades autónomas, especialmente una, muy necesitada en estos momentos porque tiene una elevadísima inflación y, por lo tanto, necesita esa condonación”.

 

Un “chantaje”, un “caramelo envenenado” y unas “migajas”

Más voces. El presidente de Murcia, Fernando López Miras, ha denunciado que hablar de la condonación sin abordar una profunda reforma del sistema de financiación es un “chantaje” y un “caramelo envenenado” y ha expresado su sorpresa por la “naturalidad con la que el Gobierno habla de la bilateralidad de la negociación con Catalunya”. En la misma línea que ha expresado Ayuso, ha esgrimido que “seguramente habrá comunidades que hayan generado deuda por una gestión ineficiente”, pero ha reivindicado que en Murcia el 80% o el 90% de la deuda “proviene de la infrafinanciación y de estar más de diez años recibiendo mucho menos dinero del Estado para sanidad o educación del que es necesario para atender las necesidades de la población”.

Por su lado, la presidenta de Cantabria y anfitriona de la cumbre, María José Sáenz de Buruaga, ha sostenido que la condonación “no es más que un parche” y lo ha presentado como un “cebo” a los territorios para intentar que “se conformen con las migajas”. La líder cántabra ha reprochado a Sánchez que no haya dado ni “la más mínima oportunidad” al “consenso” debido a las “hipotecas” que tiene con sus socios y a que es “reo” de ellos.

“Una salida hacia adelante, un titular y una escenificación”

Más voces. Desde las Illes Balears, Marga Prohens pide abordar el sistema de financiación en su integridad y no “a trozos” y considera que discutir solo sobre la condonación es “una salida hacia adelante, un titular y una escenificación”. “Todo forma parte de un conjunto, el nuevo modelo de financiación, y no somos los presidentes autonómicos los que lo tenemos que proponer”, ha esgrimido la presidenta balear. Y ha reclamado a la Moncloa que en enero presente un borrador del nuevo sistema: “No nos pondremos de acuerdo el primer día, pero por lo menos sabremos la propuesta del Gobierno, necesitamos verlo por escrito y hacer todos los ajustes necesarios”.

 

Desde Andalucía, Juanma Moreno Bonilla ha sostenido que la quita de la deuda “beneficia sobre todo a las comunidades que tienen más deuda, especialmente Catalunya”, ha reiterado que “no se puede penalizar a aquellos que han hecho el trabajo bien y no se han endeudado” y ha asegurado que no aceptará la “bilateralidad entre comunidades y el Estado” y la “ruptura de la solidaridad territorial”. Sobre la cita de enero, ha lamentado que Sánchez la haya anunciado “sin ningún papel ni propuesta seria”. En la misma línea se ha expresado el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, que ha expresado su “profunda decepción” y su “cabreo” por los resultados de la cumbre y ha criticado que la condonación implica “perdonar la deuda que han generado los separatistas” para que sea pagada por “todos los españoles”. Asimismo, ha verbalizado su sensación de que Sánchez “no quería hablar nada de nada” y le ha reprochado que solo se mueva por “anuncios efectistas”.

Feijóo ve “muy decepcionante” el resultado de la Conferencia de Presidentes

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que asistió a las últimas cumbres como presidente de la Xunta de Galicia, se ha pronunciado sobre la Conferencia de Presidentes de Santander a través de X: ha lamentado un resultado “muy decepcionante”, ha catalogado de “falta de respeto” que el Gobierno la haya “despachado sin un solo papel y con diez minutos a cada comunidad” y ha acusado a la Moncloa de haberla “condenado al fracaso ignorando toda preparación previa”.

“Se dedica más tiempo y más esfuerzos a preparar las reuniones en Waterloo que esta”, ha denunciado. “A Sánchez le estorba todo lo que no controla, es inconcebible que no se haya atendido ni una sola de sus propuestas, la España de las autonomías es la antítesis a este Gobierno empeñado en crear privilegios y agravios”, ha concluido.