El Partido Popular exhibe unidad contra la financiación singular para Catalunya pactada entre el PSC y ERC. Alberto Núñez Feijóo ha convocado este viernes a todos los presidentes autonómicos populares en el Palacete de los Duques de Pastrana de Madrid para frenar las posibles discrepancias o divergencias entre los barones del PP después de la oferta de Pedro Sánchez de reformar el régimen común de financiación con más recursos para todas las autonomías. Y la conclusión, en boca del líder del PP, ha sido clara: “Todos los presidentes renuncian expresamente a caer en una bilateralidad tramposa en lo que se refiere al sistema de financiación de los servicios públicos de todos los españoles”. Feijóo ha asegurado que los barones populares “no van a participar” de las “subastas” del PSOE y ha reivindicado que “lo que es de todos se dialogue y se acuerde entre todos” porque “España pertenece a todos los españoles”. Además, el PP exige la “inyección inmediata” de 18.000 millones de euros a las comunidades autónomas procedentes de los fondos Next Generation que el Gobierno “no ha sido capaz de ejecutar”.

 

Asimismo, los populares apuestan por un nuevo modelo de financiación multilateral. “Lo que sí da soluciones a Catalunya o al resto de España es una actualización del sistema de financiación pactada en los foros en los que estamos todos, libres de sospechas y provechos ideológicos por parte del independentismo o personales por parte del socialismo y en el que todos los españoles, territorio y preferencia política aparte, puedan salir ganando”, ha esgrimido Alberto Núñez Feijóo. Además, los populares exigen que “se abandone el cupo independentista” y que la Moncloa y la Generalitat “vuelvan al mínimo principio de lealtad institucional”. El líder del PP también ha querido subrayar que los líderes autonómicos “pelean por el beneficio de sus ciudadanos”, pero saben que, por encima de esas “legítimas aspiraciones”, hay algo común: “Los principios constitucionales, la vocación de servicio público, la lealtad institucional y la nación”. Por todo ello, ha dejado claro cuál será la actuación de los barones del PP a partir de ahora: “Todos a una”.

El PP presume de que defiende a los catalanes “engañados y utilizados por el PSOE que hace propias las falacias independentistas” y reitera su petición de que se convoque la Conferencia de Presidentes para que “se escuche a los representantes ordinarios del Estado en lugar de solo atender las imposiciones de una minoría”. Alberto Núñez Feijóo ha argüido que “no es admisible que el Gobierno pretenda que los españoles vivan de las sobras de sus arreglos con los independentistas” y ha lamentado que lo que ha presentado el ejecutivo es “insuficiente” e “insultante” para la dignidad de los ciudadanos.

Ayuso se abre ahora a reunirse con Sánchez, pero sin hablar de financiación: “No caeremos en la trampa”

Pedro Sánchez tiene la voluntad de reunirse con todos los presidentes autonómicos para abordar la reforma del régimen común de financiación que prometió el martes. Y... ¿cuál será el papel de los varones del PP? Fuentes de Génova reconocen que no se pueden meter en la relación institucional entre los presidentes autonómicos y el presidente español y esgrimen que no pueden ni impedir que acudan a la cita en la Moncloa ni obligarles a asistir si no lo quieren. La única consigna es que no vayan a hablar de dinero. Y las manifestaciones públicas de los líderes populares territoriales ha ido en esta línea, por ejemplo, las de dos de las voces con mayor relevancia: Isabel Díaz Ayuso y Juanma Moreno Bonilla.

La presidenta de la Comunidad de Madrid ha dejado claro que todos lo tienen claro: “No vamos a caer en la trampa de Sánchez y a hablar por partes acerca de lo que es de todos”. Después de que ayer pidiera a los barones del PP que no se sentaran con Sánchez (esgrimiendo que “esto no va de dinero, sino que va de España”), Ayuso se ha autoenmendado y se ha abierto a reunirse con el presidente español: “Tenemos un problema de inseguridad que está creciendo, un destrozo absoluto de las Cercanías y un descontrol migratorio, y claro que quisiera que esto fuera atendido en la Moncloa”, ha afirmado. Y ha celebrado que “todo lo que tenga que ver con la caja común y con los intereses de los españoles en su conjunto solo se hable en un foro leal, con luz y taquígrafos”.

 

Por su lado, el presidente de Andalucía ha dejado claro su voluntad de “hablar con todo el mundo” y de “dialogar”, también, con el presidente del Gobierno. Eso sí, ha dejado claro que no aceptará bilateralidad y actuará con “responsabilidad y respeto institucional”. “Vamos a hablar de lo que nos importa a los andaluces y a los españoles, la igualdad y solidaridad, no vamos a entrar en ninguna subasta ni vamos a blanquear las cesiones al independentismo”, ha concluido.

A la cumbre han asistido todos los presidentes autonómicos del PP, a excepción de la balear Marga Prohens, que en una entrevista en Catalunya Ràdio ha aducido motivos de agenda (la presidenta de les Illes participaba a las doce a la apertura del año académico de la Universitat de les Illes Balears). En su lugar, ha asistido el vicepresidente balear, Antoni Costa. También estaba presente el vicepresidente de Canarias, Manuel Domínguez, dado que el PP gobierna en coalición con Coalición Canaria (bajo la presidencia de Fernando Clavijo). Los demás barones del PP con responsabilidades de gobierno no han faltado a la cita.

“Tratar estos asuntos únicamente en los foros multilaterales diseñados para ello”

En la reunión, Alberto Núñez Feijóo y los barones del PP han aprobado un documento para comprometerse a “no romper la multilateralidad en ningún supuesto” y a tratar asuntos como la financiación autonómica “únicamente en los foros multilaterales diseñados para ello”, en alusión a la Conferencia de Presidentes y al Consejo de Política Fiscal y Financiera. Además, el escrito condena “totalmente la artimaña de la bilateralidad con los separatistas con la que el Gobierno de España pretende camuflar su determinación de construir un país con ciudadanos de primera y de segunda”.

Foto de familia de la cumbre del PP / Foto: EFE

“Tanto la actualización del sistema como cualquier cuestión relacionada con el mismo deben abordarse entre todos, a través de los cauces democráticos, para asegurar la igualdad de todos los españoles en el acceso a sus servicios públicos: no mediante encuentros arbitrarios, a capricho del Gobierno central y a puerta cerrada, sino en los foros legalmente constituidos”, esgrime. Y los líderes territoriales del PP concluyen: “Nos reivindicamos como presidentes autonómicos a la vez que ciudadanos españoles que creen en un país diverso y unido y, si otros dirigentes socialistas han renunciado a su modelo de Estado, nosotros no y lo seguiremos defendiendo todos a una”.

Imitando el protocolo y el diseño de una Conferencia de Presidentes

Con este acto, la voluntad inequívoca del PP era vender una imagen institucional que replicara una Conferencia de Presidentes. Las imágenes distribuidas, la ubicación y el protocolo refuerzan esta idea. El máximo órgano de cooperación entre el Gobierno y las comunidades autónomas no se convoca desde 2022 y se ha convertido en un caballo de batalla del PP, que lo lleva exigiendo insistentemente desde hace meses. De hecho, ha habido comunidades autónomas, como Madrid, Galicia o Baleares, que han llegado a llevar a Pedro Sánchez a los tribunales.

Alberto Núñez Feijóo preside la cumbre de presidentes del PP / Foto: PP (David Mudarra)

El sitio en el que se ha celebrado la cumbre no es casual: fuentes populares apuntan que el Palacete de los Duques de Pastrana, un palacio del siglo XIX situado en el distrito de Chamartín de Madrid, es un lugar más “bonito” y más “solemne” que la sede del PP en la calle Génova. Y no se esconden de señalar las similitudes visuales y arquitectónicas entre este palacete y el Palacio de la Moncloa. Pero es más: Feijóo ha presidido la reunión con todas las banderas de las comunidades autónomas por orden de aprobación del estatuto de autonomía, que es el mismo protocolo que se sigue en una Conferencia de Presidentes. De aquí la rareza de ver al líder del PP enfrente de la senyera y de la ikurriña, cuando, por motivos más que evidentes, ni el president de la Generalitat, Salvador Illa, ni el lehendakari, Imanol Pradales, han asistido a una reunión restringida a los barones del PP. Al fin y al cabo, este acto del PP ha querido ser un espejo de la Conferencia de Presidentes que el PP exige desde hace tiempo.