Este domingo hará 50 años de la creación la Assemblea de Catalunya en una reunión clandestina con 300 participantes antifranquistas que se encontraron a la iglesia de Sant Agustí del barrio del Raval de Barcelona. Aquel momento fue inmortalizado por Antoni Tàpies con un cuadro que después dio al Parlamento. Y ha estado ante esta obra que la presidenta de la Cámara catalana, Laura Borràs, ha conmemorado el 50.º aniversario de la Asamblea.
En un acto institucional que ha contado también con el síndic de greuges y con diversos participantes de aquella reunión, Borràs ha hecho valer que en aquella efeméride se consiguió la unidad de los partidos y organizaciones para trabajar en el objetivo común de luchar contra la dictadura franquista. Un objetivo que Borràs ha recordado que se materializó reclamando cuatro puntos: libertad, amnistía, Estatuto de Autonomía y coordinación de las fuerzas democráticas: "Pocos podríamos imaginar que algunos de estos puntos serían tan dolorosamente vigentes hoy día".
La presidenta ha pedido pues tener bien presente aquella experiencia "de unidad, generosidad y participación ciudadana" para hacer un proyecto político compartido, y ha destacado que estos principios son los que han dado bastante al independentismo en los últimos 10 años para avanzar hacia la emancipación nacional: "Dependemos como nunca de nosotros mismos para poder cambiar de una vez por todas decididamente la historia".
No se hace suficiente por la memoria
También ha tomado la palabra el síndic de greuges Rafael Ribó, que ha destacado la vigencia de los principios de la Asamblea de Catalunya y ha querido lanzar un reproche colectivo: que no se hace suficiente por la memoria. "Actos como el de hoy se tendrían que haber multiplicado por todas partes", ha opinado Ribó, que también ha hecho un llamamiento a la unidad y el consenso en los combates contra el odio, el fascismo, el autoritarismo, o bien en los retos que supone el cambio climático o la injusticia social: "Hay temas que no pueden pertenecer a ningún partido político. Nadie tiene que hacer bandera partidista".
En el acto también han intervenido al coautor del libro La gran conspiración. Crónica de la Asamblea de Catalunya, Antoni Batista, que ha destacado como se puso el país por encima de los intereses partidistas. Asimismo también han hablado varios miembros que participaron en aquella reunión: Elisabet Mas, Miquel Sellarès, Laura Tremosa y Joan Vallvé, que han recordado anécdotas de aquellos días y han puesto también en valor la unidad. Por último, la actriz Maria Josep Arenós ha sido la encargada de leer los cuatro puntos fundacionales de la Assemblea.
El síndico de agravios, Rafael Ribó / Pau de la Calle
Un día después de que haya acabado el pleno del Parlament y poco antes de conmemorar esta efeméride, Borràs ha aprovechado la mañana para recibir en audiencia al presidente del Consejo de Garantías Estatutarias, Joan Egea; el síndico mayor de la Sindicatura de Cuentas, Jaume Amat; el presidente del Consejo del Audiovisual de Catalunya, Roger Loppacher, y el director de la Oficina Antifraude de Catalunya (OAC), Miguel Ángel Gimeno. También ha participado el síndic de greuges.
Reunión de Borràs con Egea, Amado, Loppacher, Gimeno y Ribó / Pau de la Calle
En la imagen destacada, la presidenta Laura Borràs ante el cuadro de Antoni Tàpies / Pau de la Calle