La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha recibido hoy en audiencia al delegado del Frente Polisario en Catalunya, Abidin Bucharaya. Con esta audiencia la presidenta Borràs ha querido reiterar "la fidelidad de Catalunya a los derechos humanos y a los principios democráticos", y ha apelado a la "larguísima tradición de apoyo político y solidaridad de Catalunya con el pueblo saharaui". Ha puesto como ejemplos "los mismos campos saharauis" y "las familias catalanas voluntarias acogiendo a niños durante años". Borràs ha recibido el representante saharaui coincidiendo con la decisión del presidente español, Pedro Sánchez, de abandonar la defensa de este pueblo enterrando la posibilidad de que acceda a la independencia con un referéndum previsto por la ONU, y de decantarse por las posiciones marroquíes.
El cambio de postura de España sobre la situación del Sáhara Occidental, que era una colonia española, ya está teniendo consecuencias. Después de que Pedro Sánchez diera apoyo al proyecto de autonomía de Marruecos sobre el territorio saharaui y enterrara la independencia, la embajadora del Marruecos en España, Karima Benyaich, ha vuelto a Madrid. Benyaich ha vuelto ahora casi un año después de que abandonara el país a mediados de mayo de 2021. El gobierno marroquí llamó a consultas el año pasado a su embajadora en Madrid, después de la crisis diplomática abierta por la acogida a España precisamente del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, que fue tratado en un hospital de Logroño.
Ahora, sin embargo, es Argelia quien ha llamado a consultas a su embajador en Madrid, Said Musi, a raíz del cambio de bando del Estado español en el conflicto del Sáhara Occidental. Argelia ha dado apoyo tradicionalmente al Polisario y se da la circunstancia de que es el principal suministrador de gas en España. Después del cambio de postura de Sánchez sobre su posición en relación con el Sáhara Occidental, el Ejecutivo argelino se ha mostrado irritado. Y el país ha decidido llamar a consultas a su embajador en Madrid, Said Musi. Fuentes gubernamentales argelinas han asegurado que no estaba advertido de este cambio de postura. El Gobierno de España aseguró en cambio este sábado que había informado "previamente" a Argelia sobre la posición en relación con el Sáhara Occidental. Sin embargo, desde Argelia se han apresurado a desmentirlo. Fuentes diplomáticas argelinas consultadas por el diario Tout sur L'Algérie (TSA) niegan categóricamente esta afirmación y aseguran que "se trata evidentemente de una mentira rodeada de una ambigüedad intencionada para intentar calmar las legítimas preocupaciones planteadas por la clase política española".