El Alto Representante de la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, eleva el tono contra el régimen de Nicolás Maduro y califica de "dictatorial" al Gobierno de Venezuela, recordando los "más de 2.000 detenidos" en el marco de la actual crisis política, los "siete millones" de emigrantes y los dirigentes opositores exiliados. "Naturalmente, esto es un régimen dictatorial, autoritario, dictatorial, pero con decirlo no arreglamos nada. Lo que se trata es de intentarlo resolver", ha remarcado Borrell en unas declaraciones que ha hecho en Telecinco.

"En Venezuela hay más de 2.000 personas detenidas arbitrariamente después de las elecciones. El líder de la oposición ha tenido que huir. Los partidos políticos se han sometido a mil limitaciones en su actuación. Hay 7 millones de venezolanos que han huido de su país. Bueno, usted a todo eso, ¿cómo le llama?", ha reflexionado Borrell. El representante europeo ha recordado así la salida del país hacia España del candidato presidencial de la oposición venezolana, Edmundo González, de cuyo exilio Nicolás Maduro se ha burlado recientemente.

Borrell ha apuntado que "resolver las cosas reclama una cierta contención verbal, pero no nos engañemos con la naturaleza de las cosas", ha insistido. "Venezuela ha convocado unas elecciones, pero no era una democracia antes y lo es mucho menos después", ha remarcado. Recientemente, la ministra de Defensa española, Margarita Robles, definió el gobierno venezolano como una dictadura, mientras que el titular de Exteriores, José Manuel Albares, se mostró más cauto y rechazó referirse así al hablar del gobierno de Maduro. A pesar de los equilibrios, Venezuela convocó al embajador de España en el país y llamó a consultas al suyo.

Crisis con España

La crisis ha incrementado después que España abriera las puertas al opositor Edmundo González, exiliado en Madrid. En las últimas horas, el gobierno venezolano ha detenido a dos españoles a los que acusa de formar parte de un plan para matar a Nicolás Maduro. Estos dos españoles, según el régimen de Maduro, estarían relacionados con el CNI. En este plan también involucran la CIA de los EUA. El gobierno español ya ha saltado para negar todas las acusaciones. El gobierno venezolano ha hecho varias detenciones y señaló que la operación para matar al presidente venezolano implicaba introducir armamento al país y también captar mercenarios para que lo asesinaran. El gobierno de Maduro implica España en este plan de magnicidio. Estas acusaciones las lanza Venezuela cuando se ve acorralada por las denuncias internacionales sobre unos comicios plagados de irregularidades y que la comunidad internacional se resiste a reconocer.