La polémica generada por Edanvant OSAN después de hacer público un cartel que escenifica una chica intentando abofetear al conseller de Salud, Toni Comín, no ha gustado a muchos militantes y seguidores de la CUP.
La diputada de la CUP Mireia Boya, que no forma parte de Endavant OSAN, ha querido mantenerse al margen y se ha desentendido totalmente de la imagen del cartel poniendo de manifiesto que "llamadme gandiana si voláis, pero a mí tampoco me gusta ver violencia. Ninguno".
Digueu-me gandiana si voleu, però a mi tampoc m'agrada veure violència. Cap.
— Mireia Boya Busquet (@yeyaboya) 1 de febrero de 2017
Diferentes militantes o seguidores de este sector de la CUP ya han salido a condenar la imagen del cartel, pero otros se han mostrado críticos con las palabras de Boya, motivo por el cual ha tenido que afinar más y dejar claro que no aprueba ninguna violencia y no critica ninguna movilización, sino que, ha asegurado, "no me siento cómoda con el grafismo".
@xmonge no n'aprovo cap, no critico cap mobilització, al contrari. Tansols no em sento còmoda amb el grafisme. I no passa res
— Mireia Boya Busquet (@yeyaboya) 1 de febrero de 2017
Para muchos, sin embargo, no ha quedado claro y ha tenido que volver a insistir en qué "defiendo la no-violencia y critico la violencia de los recortes", pero que, en este caso, "la discrepancia es gráfica".
@Simon9barris @David_Teixido al contrari, defenso la no-violència i critico la violència de les retallades. La discrepància és gràfica
— Mireia Boya Busquet (@yeyaboya) 1 de febrero de 2017
Por su parte, la diputada de la CUP Anna Gabriel, que sí forma parte de Endavant Osan, se ha limitado a retuitear el cartell, como muestra de apoyo a la convocatoria.