Revelación grave sobre la nueva pieza de investigación de la supuesta injerencia rusa en el procés de independencia de Catalunya, que el magistrado del caso Volhov, Joaquín Aguirre, dictó el viernes pasado con la imputación de 13 personas por los delitos de malversación y traición, incluidos los presidentes Artur Mas y Carles Puigdemont. El abogado Gonzalo Boye, también investigado en esta nueva instrucción, ha hecho una comunicación en X (antes Twitter), en la cual, de forma irónica y preocupante, revela que una parte de la resolución judicial sale ya en el libro La trama rusa, contra el independentismo catalán, del periodista David Alandete, que se ha presentado este miércoles. En esta resolución, el magistrado Aguirre sostiene que cuando recoja las pruebas elevará un informe razonado al Tribunal Supremo para que investigue a Puigdemont, ahora diputado de Junts en el Parlament, como al diputado Francesc de Dalmases, por su aforo.

"No estoy seguro de qué se redactó primero, si este libelo o el acto por el cual el juez Aguirre nos ha imputado, pero las similitudes son preocupantes. Además, hay un reconocimiento explícito del origen de la información reproducida en él", declara el abogado de Puigdemont y del director de su oficina, Josep Lluís Alay, imputado al caso Volhov y ahora en la nueva pieza. Boye ya anunció que prepara una querella contra el titular del juzgado de instrucción 1 de Barcelona por prevaricación porque sostiene que ha desobedecido la orden de la Audiencia de Barcelona de parar el caso Volhov a 1 de agosto de 2023, y ahora con la misma documentación intervenida y conocida hace cuatro años, abre una nueva investigación.

La identificación de Carles Porta

En concreto, en la nueva resolución, el titular del juzgado de instrucción 1 de Barcelona reproduce unos SMS extraídos del móvil de Víctor Terradellas, exdirigente de relaciones internacionales de Convergència, presidente de la Fundación Catmon y también investigado, con el entonces president Carles Puigdemont, la víspera de la Declaración Unilateral de Independencia (DUI), el 27 de octubre de 2017, suspendida por el mismo Govern. "Estamos Carles, Miquel y yo aquí. A 50 metros del Palau", recoge al juez. Frase reproducida en el libro. La gravedad es que esta conversación estaba en el sumario del caso Volvoh, pero no que Carles es Carles Porta, periodista y "amigo personal de Puigdemont", como difundió el magistrado Aguirre. El libro, con una supuesta elaboración y producción de meses, también identifica al periodista Carles Porta. Como también a Miquel Casals. El juez ha imputado a Porta por el hecho de ser conocedor que Terradellas llevó a dos ciudadanos rusos a entrevistarse con Puigdemont a la Casa de los Canonges, admitido por Presidencia, como con otros representantes extranjeros, y más en el 2017. De estas conversaciones, el juez Aguirre sostiene que Porta "tendría un papel de relevancia en la trama ruso-catalana."

LLIBRE ALANDETE
Una parte del libro, donde se identifican a investigados, hasta ahora desconocidos y anunciados por el juez hace solo una semana, como el periodista Carles Porta

Colaboradores, denunciados por el abogado

De las conversaciones de Terradellas y otros investigados, el periodista afirma en el libro: "Eso lo sabemos por comunicaciones suyas intervenidas después por la Policía y depositadas en la causa judicial." En la investigación del caso Volhov, Boye ha denunciado varias veces que el magistrado Aguirre se habría ayudado de un grupo de periodistas para impulsar la investigación, que después ha sido incorporada en la causa y facilitada a la policía judicial del caso, primero la Guardia Civil y ahora la Comisaría General de Información de la policía española. Las defensas podrían exigir que se hagan periciales y que se acrediten si ha sido la Guardia Civil o un externo no acreditado quien ha extraído la información del móvil de Terradelles y de otros encausados. Si la cadena de custodia no es clara y respetada, se podrían invalidar todas las conversaciones intervenidas y que sostienen el relato acusatorio.

Reclamo de amnistía

En el último escrito presentado al juzgado, el penalista -a requerimiento del juez- ha pedido la aplicación de la amnistía a Alay y ya denuncia que el instructor difundió "la resolución del 21 de junio de 2024 ampliamente a los medios de comunicación con antelación a su notificación a los afectados". El enero pasado, Boye también presentó la recusación del juez, para que fuera apartado del caso Volhov, porque hizo una entrevista en una televisión alemana, en la cual explicaba la investigación de la pieza de la trama rusa. El mismo día que se emitía, se difundía una nueva resolución del juez Aguirre que ordenaba el impulso y después el secreto de la pieza de la trama rusa.

El penalista ha denunciado abiertamente que el magistrado ha compartido información de esta instrucción penal con un consorcio de periodistas ha estado compartiendo. En el caso de su intervención en la televisión alemana, la Audiencia de Barcelona consideró que no dio una información perjudicial a la investigación, a pesar de añadir que no era del todo acertado. En una segunda resolución, del mayo pasado, el tribunal le ha ordenado que pare el caso Volhov porque no hay ninguna diligencia pendiente de realizar. La respuesta del juez Aguirre ha sido abrir una nueva investigación de la supuesta trama rusa.