Se necesitan un total de 132 millones de euros el año para hacer oficiales el catalán, el vasco y el gallego en la Unión Europea. Esta es la cifra a la que apunta la Comisión Europea en un informe preliminar sobre el impacto financiero en la UE de la oficialidad de las tres lenguas, en respuesta a una solicitud presentada por el Gobierno. Así, Bruselas calcula que el coste de la oficialidad de cada una de las lenguas es de 44 millones de euros, por lo que la cifra total es de 132 millones, según ha avanzado el diario El País este viernes. En el documento, el ejecutivo comunitario señala que esta estimación está hecha siguiendo el antecedente de Irlanda para oficializar el gaélico en la UE el año 2015 y subraya que se tendrían que valorar otros factores para que la cifra fuera más "exacta".
La Comisión Europea ha hecho estos cálculos basándose en aspectos como la contratación de traductores e intérpretes, la adaptación de las bases de datos y los sistemas técnicos de la UE para incluir las tres lenguas cooficiales en el Estado. Teniendo en cuenta estos aspectos básicos para oficializar el catalán, el vasco y el gallego, el ejecutivo apunta a un presupuesto de 132 millones de euros el año, unos costes que el Gobierno se ofreció a asumir para sacar adelante la oficialización, ante las reticencias de varios estados miembros.
El informe destaca que, para tener una cifra más exacta del impacto económico, se tiene que valorar la facilidad para contratar personal capacitado para hacer la traducción, interpretación, revisión legal y publicación para las instituciones y las agencias de la UE en catalán, gallego y vasco, así como el coste de organizar procesos de concurso y de selección. También señalan el impacto de que existan o no bases de datos de terminología necesarias para "alimentar la maquinaria de traducción" en cada lengua. "Si no existen (...), se necesitará inversión para generar memorias de traducción y tecnología y equipamiento técnico para desarrollarlo", dice el texto, según informa la ACN. El documento también remarca que puede haber un proceso transitorio hacia la implementación de la oficialidad, por lo que eso "mitigaría algunos de los costes" mientras dure este proceso.
La Comisión Europea ha elaborado este informe sobre el coste de la oficialidad de las tres lenguas a petición del Gobierno, a raíz de las dudas presentadas por algunos estados miembros. Países como Suecia o Finlandia expresaron abiertamente su preocupación de que la oficialidad del catalán, vasco y gallego pudiera ralentizar tareas o tuvieron un "impacto presupuestario". En este sentido, varios estados pidieron a España un dictamen de los servicios legales del Consejo y más tiempo para estudiar el impacto económico y político que supondría la medida.