"Los usuarios del R2 Sur no tenemos más paciencia", así de claro y rotundo se ha mostrado David Cortés, miembro de Dignitat a las Víes, en declaraciones en El Nacional.cat. Los usuarios han llevado a la estación de Segur de Calafell (Baix Penedès) su indignación, su cabreo y el malestar por las incidencias que hace años que duran en las principales líneas ferroviarias de Catalunya. El ambiente a la estación de Segur de Calafell era caldeado, de cabreo y indignación, hasta el punto que varios usuarios han entrado dentro de la estación, hecho que ha provocado la intervención de los Mossos d'Esquadra y la Policía Local con el fin de expulsar a la manifestación de dentro del edificio. De hecho, incluso un usuario ha acabado identificado por hacer un llamamiento a entrar dentro de la estación. Un escenario que ya se vio durante las comparsas de Vilanova i la Geltrú, aunque sea habitual cada año.
El más de un centenar de manifestantes que había han mostrado su malestar, ya sea con el Gobierno, con Renfe, con Adif y con los trabajadores de estas. "Los trenes llegan sistemáticamente 15 minutos tarde a paseo de Gràcia día sí, día también. No hay ningún tren que llegue al mismo tiempo", decía una usuaria estudiando en declaraciones a El Nacional.cat. "Voy a clase de mañanas y por la tarde trabajo. Por lo tanto, tengo que salir de clase deprisa angustiada, sin saber si llegaré bien al trabajo o no", asegura esta vecina de Cubelles. Un reflejo del cual viven diariamente, día sí, día, también miles usuarios de Rodalies. Otra estudiante explica su situación a El Nacional.cat. Hace prácticas al hospital y le exigen unos horarios. "Siempre tenemos que estar sufriendo y en vez de llegar a las 16 h para comer llego a las 18 h. No tengo tiempo para nada", lamenta esta usuaria del R2 Sur. Los retrasos en Rodalies provocan hechos tan anómalos que haya usuarios que tengan que comer a las 18 h de la tarde...
Carteles y cánticos muy duros contra Renfe
Los gritos, los silbidos, las pancartas, camisetas de "Puta Renfe"... se han apoderado de la estación de Segur de Calafell este mediodía. Con frases muy duras contra los sindicatos de Renfe: "Hay sindicatos en Renfe que eligen perjudicar al usuario antes que al empresario. Muchas gracias". U otros carteles haciendo sarcasmo de la empresa operadora de la red ferroviaria catalana: "Marca Renfe: Trenes i vias se averian; ascensores y escaleras no se arreglan. Accesibilidad? Ja, ja, ja". También estaba como protagonista el famoso meme de Renfe: "Ten fe". El ministro de Transportes, Óscar Puente, no ha estado exento de críticas: "Sr ministro: no se deje tomar más el pelo, ya habemos demasiados calvo-Renfes". Mientras tanto, miembros de la ANC iban repartiendo folletones con datos, como Rodalies registra por término medio 31 incidencias diarias, que España invierte 3,5 veces más en Madrid que en Catalunya o que con solo 11 días sin espolio fiscal se podrían comprar 50 nuevos trenes.
El malestar ha sido tan grande, que mientras una usuaria hablaba con El Nacional.cat, los usuarios lo han rodeado para aplaudirla. "Estamos hablando de las infraestructuras, pero nadie habla de la actitud de los trabajadores hacia los usuarios. Es vergonzoso la falta de educación y prepotencia que tienen", asegura esta usuaria, que cree que les tendrían que dar una clase de educación y de clase. "Si fura por mí estarían todos en la calle. Ya está bien", decía, visiblemente enfadada, mientras los manifestantes lo aplaudían.
La condena de Rodalies
La manifestación ha contado con una amplia representación política, con los diputados de Junts, Montse Ortiz, d'ERC, Lluïsa Llop, y de los Comuns, Lluís Mijoler. También ha estado presente la alcaldesa de Sitges, Aurora Carbonell, la teniente de alcaldía de Vilanova i la Geltrú, Iolanda Sánchez, la alcaldesa de Cubelles, Rosa Fonoll, o el primer teniente de alcaldía de Cunit, Jaume Casañas. Con todo, David Cortés ha dado el pistoletazo de salida a la concentración delante de la estación de Segur de Calafell con duras palabras contra el Gobierno, Renfe y Adif. "Somos nosotros los que hemos llegado al límite de nuestra paciencia. Nuestra vida depende de un tren que se ha convertido en una condena. Nos desgasta y nos ha llevado al límite", aseguraba el representante de Dignidad en las Vías.
Incluso, la jornada ha acabado hasta con alteraciones graves en la red ferroviaria. Con una circulación interrumpida entre Altafulla y Sant Vicenç de Calders y un servicio alternativo por carretera entre Tarragona y Cunit; y Tarragona, Altafulla, Torredembarra, Sant Vicenç de Calders y Cunit. "No nos quedaremos quietos. Nos están obligando a abandonar nuestras casas. No lo permitiremos. Que se pongan a trabajar. Si no son capaces de hacerlo que se aparten", exigían finalmente desde Dignidad en las Vías.