El secretario general de UGT, Camil Ros, considera que el 21-D será un "simulacro de referéndum", ya que se interpretarán los resultados en función de cuántos votos habría obtenido el sí, el no y el espacio de en medio. En una entrevista en la ACN, el líder sindical ha considerado que la cita electoral "nos dará una foto" que "tiene que hacer reflexionar el gobierno del Estado".
A partir de aquí, hace falta que los políticos "se sienten a negociar" y "tarde o temprano se tendrá que votar", defiende al secretario general. Ros reclama la liberación de los presos y hace un llamamiento a la participación de cara a los comicios electorales para que se supere el histórico 77,5% del 27-S. Por otra parte, el líder de UGT reclama a los partidos que, a pesar de la excepcionalidad del momento, no olviden la agenda social. "Los que salgan escogidos lo serán para una legislatura, no para 15 días, y es importante saber qué proponen más allá de la relación Catalunya-Espanya", ha asegurado.
"No votamos un referéndum, el 21-D, pero tiene un punto de referéndum, como mínimo tendremos un simulacro de foto de referéndum", constata. El líder de la UGT pone de manifiesto que, una vez se sepan los resultados de las elecciones del 21 de diciembre, los resultados se leerán en clave del apoyo a la independencia.
"Se mirará más eso que si un partido sube más que otro", ha asegurado. "Las elecciones nos darán la foto de cómo estamos ahora, y a partir de aquí hay que negociar. Y evidentemente a las sociedades democráticas los cambios legislativos importantes, de Constitución o de Estatutos, se hacen votando, así que tarde o temprano se tendrá que votar", ha añadido.
Ros ha recordado que la UGT defiende el derecho a decidir en un sentido amplio, y aquí "cabe el referéndum". "El problema político Catalunya – España se tiene que resolver votando", insiste. El secretario general de la UGT subraya que "el choque de trenes" ya se ha producido y se han visto las consecuencias en un sentido y en otro, así que "ahora con más razón se tiene que poder votar con normalidad", como ya se ha hecho en otros países.
Con respecto a la participación, Ros hace un llamamiento para que sea masiva y haya una nueva "demostración de civismo de la sociedad catalana". En este sentido, Ros desea que la participación supere el 80%: "El 21-D ha venido como ha venido, pero está aquí, y nosotros decimos, desde el máximo con respecto a los posicionamientos individuales, que todo el mundo tiene que ir a votar de manera clara".
La convocatoria electoral ha dejado la Taula per la Democràcia en "stand-by" a menos que haya "ataques a los derechos y las libertades", señala Ros. Y es que en campañas electorales, la UGT no hace "ninguna actividad que pueda ser relacionada con la política". La Taula per la Democràcia es una organización transversal con una cuarentena de entidades, entre las cuales también hay patronales, universidades, el ANC o Òmnium, entre otros.
Finalmente, Ros ha pedido a los partidos que no olviden la agenda social. A modo de ejemplo, el líder sindical reclama saber qué propuestas tienen para luchar contra la precariedad laboral y la pobreza.