Unas 3.000 personas, según la Guardia Urbana —hasta 8.000 según la organización—, se han manifestado este miércoles por las calles de Lleida en la marcha independentista con motivo de la Diada 2024. Este año, la defensa del campo y el apoyo al sector primario ha sido el eje temático de la convocatoria de la Assemblea Nacional Catalana y el resto de entidades independentistas en la capital de Ponent, justo después de las movilizaciones multitudinarias de los agricultores y ganaderos que han marcado el 2023 y el 2024.

La manifestación leridana ha arrancado en la avenida de Catalunya, justo ante la delegación del Govern, y ha finalizado en el cruce de Rovira Roure con el Passeig de Ronda, donde se ha celebrado el acto político. Han encabezado la marcha un grupo de motoristas y también un tractor, como símbolo del campo. La multitud se ha ido desplegando hasta a la altura del Rectorado de la Universitat de Lleida (UdL). A lo largo del recorrido, se han podido sentir varias consignas como "viva la tierra, la tierra es vida", "viva el campo y viva la tierra libre", "sin desobediencia no hay independencia" o "sin el campo, no hay soberanía". Entre los manifestantes se han visto algunas pancartas contra ERC por la investidura del president Salvador Illa y contra la falta de unidad de los partidos soberanistas.

Manifestación por la Diada en Lleida / ACN

En la protesta había los líderes de los partidos independentistas, Junts, Esquerra Republicana y la CUP, y también los de las entidades que se han sumado a la organización del acto —Òmnium Cultural, Consejo de la República, CDR, Associació de Municipis per la Independència, CIEMEN y la Intersindical. También ha asistido a la manifestación leridana el sociólogo egarense Salvador Cardús.

La ANC ha valorado positivamente el resultado de la convocatoria en Ponent. El coordinador de la entidad en Lleida, Jordi Alsina, ha querido destacar el éxito de la marcha que "ha cortado" el centro de la ciudad para denunciar "el espolio fiscal" del Estado, unos "22 millones de euros que podrían arreglar todos los problemas del campo catalán". Alsina, que ha recordado las últimas grandes manifestaciones de los agricultores, ha denunciado que el Estado no destina suficientes recursos de las ayudas agrarias europeas a Lleida.

Manifestación por la Diada en Lleida / ACN

El encargado de presentar el acto final, que ha empezado puntal a las 17:14 h, ha sido el clown, cómico y guionista Ferran Aixalà. El manifiesto lo han leído Miquel Torres, payés de S. Martí de Maldà y presidente del Grup de Recerques de les Terres de Ponent, y Gemma Bertrand, payesa de Juneda y emprendedora. Han hecho referencia al campo y el conjunto del sector primario como "elemento clave" de la lucha por la independencia de Catalunya. En este sentido, han puesto el ejemplo del 1-O, cuando centenares de payeses dispusieron su maquinaria para proteger las urnas del referéndum. Después de la lectura del manifiesto se ha hecho la conexión con el acto central en Barcelona. A continuación se ha cantado el himno de los Segadors y acto seguido se ha dejado paso a las actuaciones musicales.

"Volvamos a las calles" con cinco marchas simultáneas por toda Catalunya

Este año bajo los lemas "Hagamos más corto el camino" y "Volvamos a las calles", las manifestaciones de la Diada se dan de manera descentralizada en diversas de las principales ciudades de Catalunya: Barcelona, Tarragona, Girona, Lleida y Tortosa. A cada una de las cinco ciudades se reivindica una demanda del movimiento independentista por Catalunya. En Barcelona, la reivindicación ha sido la vivienda "digna y asequible"; en Tarragona, un mejor servicio ferroviario; en Girona, en contra de "el espolio fiscal" del Estado que "estropea el sistema sanitario catalán"; y en Tortosa, en favor de una "justa" gestión del agua.

Con estas marchas simultáneas, las principales entidades de la sociedad civil vinculadas al independentismo aspiran a "recuperar la fuerza y el impulso" de las movilizaciones masivas de la etapa 2012-2017. En un momento en el cual el movimiento ha estado en horas bajas, habiendo perdido la mayoría absoluta en el Parlament y con las constantes disputas y desavenencias entre los dos principales partidos, Junts y ERC, hasta el punto de haber llegado a romper un Govern de coalición, ahora las entidades se marcaron el reto de recoser heridas y construir puentes para "desde la diversidad y la pluralidad" poner en el centro el objetivo que tienen en común, la independencia de Catalunya, y "sumar fuerzas para combatir un Estado español antidemocrático".