Sigue la guerra abierta en Esquerra Republicana. Después de que este lunes se hiciera público que la secretaria general del partido, Marta Rovira, pidió explotar la campaña de los carteles infamantes contra los hermanos Maragall sobre el Alzhéimer para “arrancar votos de solidaridad”, la candidatura de Junqueras ha expresado su indignación y ha exigido llegar al fondo de la cuestión. El exconseller d'Exteriors, Bernat Solé, miembro de la candidatura del presidente de ERC, ha desmentido que sean responsables de los mensajes: “Es evidente que no estamos detrás, y nos hemos sentido heridos porque se asociaran estas filtraciones a una candidatura”. En una entrevista en El Món a RAC1, Solé ha pedido “que no se haga un chismorreo público de esta situación” y ha querido recordar que el partido tiene unos órganos internos donde se pueden vehicular este tipo de disputas. Con todo, ha reconocido que estas investigaciones siempre son complejas, pero ha pedido “el tiempo que haga falta para resolver esta situación”. Solé ha exigido “evitar la aceleración para relacionar las filtraciones a algunas candidaturas”, en referencia a las palabras de Marta Rovira, en las cuales ha relacionado Junqueras con la “campaña de contraste” de ERC. A través de una carta publicada en las redes sociales, Rovira apuntó que “desde la Presidencia se consideraba que éramos blandos y mucha gente nos pedía que nos defendiéramos más (“somos demasiado blandos, también tenemos que romper piernas”).

Confianza en el congreso de ERC

Bernat Solé ha pedido que el proceso de investigación sea “lo más limpio posible”. Preguntado sobre como está viviendo este cruce de acusaciones dentro del partido republicano, el exconseller ha lamentado que “no es el ERC que yo quiero y que quiero”. En este sentido, ha defendido que quiere un partido que sea capaz de resolver los conflictos de forma interna y no a través de las redes sociales. Sobre estas prácticas ha asegurado que “desde la candidatura de Oriol Junqueras no trabajamos de esta manera”.

Con el congreso de ERC al horizonte, Solé ha confiado en poder recoser el proyecto a pesar de los presuntos enfrentamientos dentro del partido de los últimos meses, motivo por el cual “doy apoyo a la candidatura de Junqueras, porque siempre ha mostrado la voluntad de querer reconstruir el proyecto”. Con todo, ha asegurado que a partir del 30 de noviembre “gane quien gane al Congreso, tendrá que ganar el partido”.

La guerra en ERC por los carteles de los Maragall

Este lunes salieron a la luz unas conversaciones privadas entre miembros de ERC en un grupo de Signal donde se mostraba el interés del partido al sacar provecho de la campaña, cuándo se supo que se había ejecutado y que se había hecho desde filas propias, simulando un ataque de falsa bandera. En concreto, Marta Rovira aseguró que “es una campaña tan agresiva que si la denunciamos públicamente quizás arrancamos unos cuantos votos de solidaridad”, tal como se puede leer en una captura de pantalla, que ha avanzado El Matí de Catalunya Ràdio y al que ha tenido acceso ElNacional.cat, de los grupos internos de Esquerra. Este mensaje fue enviado después de que uno de los jefes locales de Esquerra en Barcelona enviara las imágenes. La portavoz parlamentaria Marta Vilalta también dijo que era “muy fuerte”, en el mismo canal. Más tarde, Rovira dijo que había que denunciar los hechos.

Solo unas horas más tarde de hacerse públicos los mensajes, Rovira salió al paso a través de una carta publicada en sus redes sociales. “No soy la culpable” ha apuntado en un comunicado para “romper el silencio” y dar “explicaciones”. La dirigente ha afirmado que no habría autorizado “nunca” la acción de los carteles contra los Maragall. De hecho, Rovira relaciona esta “campaña de contraste” con el entonces presidente del partido, Oriol Junqueras. “Ya no puedo más y necesito hacer unas aclaraciones porque las filtraciones son intencionadas, faltan a la verdad y pretenden construir una realidad que no es cierta”. Por su parte, varios miembros de la candidatura de Junqueras, acusaron a Rovira de debilitar a ERC lanzando “acusaciones sin evidencias”.