Carlos Lesmes tenía estopa para todo el mundo. Después de reclamar una reunión urgente entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo para desbloquear el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el también presidente del Supremo, lejos de alejarse del debate político, ha entrado en el barro de las negociaciones entre el gobierno catalán y el español en el marco de la mesa de diálogo. Lesmes ha cargado contra el discurso que defiende la desjudicialización del conflicto catalán: "Existe el riesgo de que se acabe produciendo una huida de la ley o, lo que es más grave todavía, del principio de igualdad en su aplicación". En el acto de apertura del año judicial presidido por Felipe VI este miércoles, Lesmes ha arremetido contra algunos sectores políticos y ha lamentado que hablen de "huir de los jueces" en relación con Catalunya "como si fueran estos los que hubieran provocado los conflictos con sus actuaciones en defensa de la legalidad".
Lesmes recuerda los hechos de 2017
Cuando hace cinco años que el Parlament aprobó las leyes de desconexión, el jefe de los jueces ha sacado pecho de la acción judicial durante el otoño del 2017. "La fortaleza de nuestro Estado de derecho y la actuación posterior de los jueces a raíz de las querellas presentadas por la Fiscalía General del Estado sirvieron para preservar nuestra convivencia y garantizar la primacía de nuestra Constitución", ha asegurado. Para Lesmes —que hace nueve años que es presidente del CGPJ—, los jueces españoles han ayudado a la "gradual y llamativa" mejora de la imagen que tiene la ciudadanía del poder judicial. Lesmes ha criticado que haya sectores políticos que hablen de "huir de los jueces" en relación con Catalunya "como si fueran estos los que hubieran provocado los conflictos con sus actuaciones en defensa de la legalidad".
Varapalo a Pablo Iglesias
El ventilador de Lesmes también ha apuntado al exvicepresidente del gobierno central y exlíder de Podemos, Pablo Iglesias. Sin mencionarlo, le ha recriminado que afirmara que la justicia española sufrió "una humillación" ante la negativa de Bélgica y Alemania de extraditar al expresident Carles Puigdemont y a otros líderes del procés independentista. Según ha dicho, "tal vez ignoraba este dirigente político al realizar tan desafortunadas declaraciones que el derecho europeo lo interpreta en última instancia y con carácter vinculante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea". Para acabar, ha recordado que este tribunal todavía tiene que resolver una cuestión prejudicial elevada por el juez Pablo Llarena. "La calificada opinión del abogado general Richard de la Tour no corrobora precisamente esta supuesta humillación a la justicia española", ha remachado.