El president Carles Puigdemont puso en marcha ayer su actividad institucional sólo poner un pie en Ginebra (Suiza), donde pasará cuatro días participando en varios actos sobre la regresión de los Derechos Humanos en España. El presidente llegó ayer a primera hora de la tarde en la ciudad suiza donde ya se reunió por la noche con un grupo de concejales.
Puigdemont se ha reunido con seis electos locales de Ginebra desde diferentes formaciones de izquierdas: Amanda Gavilanes y Pascal Holenweg, del Partido Socialista; Maria Pérez y Tobias Schnebli, de Juntos a la Izquierda, una coalición de izquierdas de la misma Ginebra; y Alfonso Gomez, del partido Los Verdes.
Una de las concejalas, Amanda Gavilanes, ha calificado el encuentro como "un gran momento" que ha podido compartir con lo que considera "al autor de la cuestión del derecho a la autodeterminación", según ha explicado la misma concejala.
Solidaridad suiza
No es la primera ocasión que los políticos suizos se solidarizan con los políticos catalanes exiliados. Sin ir más lejos, un grupo de políticos del Partido Socialista de Suiza dio apoyo a la exdiputada de la CUP en el Parlament, Anna Gabriel, justo después de que decidiera trasladarse a Suiza.
Es más, el presidente Puigdemont ha sido muy bien recibido en el país. Buena prueba es el hecho de que el jefe del ejecutivo pasará cuatro días participando en varios actos sobre la dificil situación de los Derechos Humanos en España. El primero de ellos tendrá lugar hoy en el Festival del Cine, donde se proyectará un documental francés sobre el referéndum catalán del 1-O, y que se titula Catalunya: España, a un paso de la crisis nerviosa.