El presidente en el exilio, Carles Puigdemont, ha asegurado este domingo que el presidente Lluís Companys "es una víctima formal del estado español" y, por este motivo, reclama al Estado que pida "perdón" en el pueblo de Catalunya por su fusilamiento, "porque lo ejecutó por haber estado presidente". Coincidiendo con el 83.º aniversario del fusilamiento, Puigdemont ha dicho a través de Twitter que la ejecución de Companys "es un crimen que todavía resuena", porque "fue asesinado en manos de fascistas", pero "detenido, extraditado, maltratado, juzgado, condenado y ejecutado por las autoridades del estado español de acuerdo con la legislación vigente". "No es una víctima de un pelotón de incontrolados", ha añadido. En el mismo mensaje, Puigdemont comparte un enlace con el expediente del consejo de guerra sumarísimo a Companys.
Se trata de un mensaje similar al del presidente Aragonès. El independentismo ha querido apretar el Estado para el 83.º aniversario del fusilamiento de Lluís Companys. Por eso, Aragonès ha seguido con la reivindicación histórica del catalanismo y ha reclamado al Gobierno una "declaración institucional" que restaure la figura del presidente Lluís Companys, que "reconozca la injusticia de su procesamiento", que ponga de manifiesto la "ilegitimidad" del tribunal que lo juzgó y que anule la sentencia.
Junts marca como línea roja la unilateralidad
Por su parte, el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha asegurado este domingo que no renunciarán a la unilateralidad, porque estaría "como renunciar en la misma nación". Lo ha afirmado en el homenaje del partido al expresidente de la Generalitat Lluís Companys en el 83.º aniversario de su fusilamiento, y en el mismo lugar|sitio donde fue asesinado: el Cementerio de Santa Eulàlia del castillo de Montjuïc de Barcelona. Al asegurar que no renunciarán a la unilateralidad, ha dicho: "No hace falta ni que nos lo pidan, porque lo que nosotros queremos es que esta nación sea libre," y ha añadido que el partido quiere ser así leal a los ideales de Companys, haciendo referencia a la investidura del líder del PSOE, Pedro Sánchez.
Un mensaje que ha seguido a la presidenta de Junts, Laura Borràs, quien ha dicho al Estado "heredero" del fusilamiento de Lluís Companys que Catalunya no se rendirá: "No renunciaremos ni a la unilateralidad ni a ningún recurso legítimo para avanzar hacia la libertad". En una declaración desde el cementerio de Montjuïc, después de la ofrenda floral al presidente fusilado en 1940 (hoy hace 83 años), Borràs ha añadido que Companys representa el hecho de "no rendirse y mantener la esperanza intacta". La presidenta de Junts ha concluido que rendir homenaje y recuerdo a Companys también "espolea" a seguir avanzando.