"Estos son los delitos que cometeréis, los hacéis a sabiendas, ¡estáis avisados!" Esta fue la frase con la que el portavoz de Ciutadans, Carlos Carrizosa, advirtió a los miembros de la Mesa del Parlament, con su presidenta Carme Forcadell al frente, y de la Junta de Portavoces celebrada el martes por haber convocado el pleno sobre la resolución de desconexión.
La advertencia dejó anonadados a los asistentes por el tono y por la contundencia mostrados por el portavoz ciudadano, algo inédito en un órgano marcado por los formalismos como es la Mesa del Parlament.
Según los asistentes consultados por El Nacional, Carrizosa detalló los delitos que podían cometer los portavoces –como el de desobediencia– y enfatizó que eran conscientes de su comisión.
Carrizosa quiso dejar constancia de la queja en el acta de la Junta, en la que normalmente las reyertas verbales no se incluyen. Este documento, al que ha tenido acceso El Nacional, deja bien claro la intencionalidad del portavoz de la formación que lidera Inés Arrimadas. "El portavoz de G[rupo] P[arlamentario] de Ciutadans advierte de las posibles responsabilidades de inhabilitación y otras de carácter penal en las que pueden incurrir los miembros de la Mesa en caso de que se rechacen las peticiones de reconsideración y pide que así conste en acta", se lee en el documento.
En la misma acta se refleja que el portavoz de CSQP, Joan Coscubiela, también pide que "conste en acta su discrepancia sobre los comentarios hechos por el portavoz de GP de Ciutadans sobre las responsabilidades en qué podrían incurrir los miembros de la Mesa".