Agitación marca de la casa. Un día más, Ciudadanos ha aprovechado la tribuna del Parlament para incendiar el ambiente. Esta vez Lorena Roldán ha cedido su turno a Carlos Carrizosa para que formulara la pregunta correspondiente al president de la Generalitat durante la sesión de control de cada pleno. El hombre fuerte del partido naranja en Catalunya ha disparado a diestro y siniestro, contra el grupo de JxCat y el Govern, apuntando a hasta ocho miembros del espacio Torra-Puigdemont. "Más que una bancada de Gobierno parece una rueda de reconocimiento", ha sentenciado.

El inicio de la intervención tenía un vínculo lógico con la actualidad. Le ha preguntado a Torra si preveía cesar al secretario general del Deporte, detenido hace un par de semanas, presuntamente por haber desviado fondos públicos "hacia el entorno convergente". El president le ha respondido que todavía no conocía "los detalles del caso", pero que, sea como sea, "con la corrupción tolerancia cero".

A partir de aquí se ha abierto la caja de los truenos. Y Carrizosa ha empezado a señalar "la bancada que tengo delante". Primero a los consellers Damià Calvet y Jordi Puigneró, que "vienen de Sant Cugat, el epicentro del 3%". Después contra la consellera Meritxell Budó, "porque pagaba viajes a Waterloo y tuvo que devolver el dinero". El siguiente, otro miembro del Govern, el titular de Interior MIquel Buch, "investigado por pagar con dinero público un asesor que hacía de escolta de Puigdemont".

Pero no ha acabado aquí la cosa. Una vez ha acabado con los integrantes del ejecutivo, ha seguido con varios miembros de Junts per Catalunya: Artadi, Borràs, Dalmases, Madaula. Y aquí es donde el patinazo ha sido mayor. Le ha pedido que dé explicaciones sobre las "mordidas de Catdem al Palau de la Música, cuando su amigo, el señor Colomines, era el director".

Este comentario le ha merecido un toque de atención del presidente del Parlament. Roger Torrent ha advertido a Carrizosa que la cámara no pide "explicaciones a las diputadas por sus amistades o parejas sino por lo que han hecho ellas mismas". El surrealismo se ha acabado de instalar en el hemiciclo cuando el líder de Cs se ha quejado de que el apunte de Torrent era "machista".

Torra, a quien tocaba responder la intervención de Carrizosa, ha evitado entrar en el cuerpo en cuerpo. "Es uno de los días en que ustedes han caído más bajo; si quieren esconder su derrota con estos dos minutos y medio de difamaciones y de infamias, me parece lamentable, Ustedes quieren crispación, pero no la tendrán".