Le es igual la demanda. El líder de Ciutadans en Catalunya, Carlos Carrizosa, se mantiene firme al cargar contra las familias que son contrarias a la imposición del 25% del castellano en las escuelas catalanas. Hoy se ha conocido que la Asociación de Familias de Alumnos de la escuela Turó del Drac de Canet de Mar ha interpuesto una demanda de conciliación previa a una querella contra los diputados del Parlament Carlos Carrizosa (Cs), Lorena Roldán (PP) y Sergio Macián (Vox) por presuntas calumnias e injurias, después de que en el pleno del Parlament del 15 de diciembre dijeran que se asediaba una familia que había pedido más clases de castellano. A pesar de eso, Carrizosa no ha dudado: "Sí, critiqué, y lo volvería a hacer, a los energúmenos que asediaron al niño y a su familia, y a los políticos que lo promovieron", ha escrito en su perfil de Twitter.

El líder del partido naranja ha anunciado también que no "perderá el tiempo" al ir a la conciliación de la querella presentada, ya que considera que las acusaciones no tienen "mucho fundamento". Carrizosa considera que las familias que han presentado la querella se han equivocado, y ha dicho estar seguro de que no se querellarán, aunque la querella ya ha sido aceptada a trámite en el juzgado de primera instancia número 24 de Barcelona.

Las declaraciones del pleno del 15 de diciembre por parte de la derecha causaron mucha indignación. Tal fue el punto al cual se llegó que Carrizosa comparó el caso de la escuela de Canet de Mar con el municipio de Ermua, donde fue asesinado Miguel Ángel Blanco en manos de ETA. El líder naranja lo dijo durante una sesión de control al presidente de la Generalitat, el cual fue muy contundente con Carrizosa: "Hoy se ha equivocado. Lo conozco y estoy convencido de que cuando piense se arrepentirá de lo que ha hecho". Días antes, Carrizosa había comparado al niño de Canet con Rosa Parks.

 

Criminalización del centro

En un comunicado, las familias han apuntado que las declaraciones "no se corresponden con el clima de buena convivencia que existe en nuestra escuela, ni con la actitud de las familias, que siempre hemos rechazado cualquier forma de señalamiento, intolerancia y falta de respeto", y han denunciado que el centro de Canet ha sido "objeto de criminalización por parte de algunos partidos políticos con la voluntad de construir un relato absolutamente falso sobre la situación lingüística" en las escuelas catalanas y su modelo. Todo eso, denuncian, ha acabado fomentando una "verdadera situación de acoso y señalamiento público" hacia la comunidad, con pintadas con amenazas e insultos en redes sociales y medios de comunicación, han asegurado.

La asociación de familias defiende que las escuelas tienen que ser espacios de protección de la infancia dentro de un modelo de convivencia: "Premisas básicas que, por desgracia, han ignorado a las personas contra las cuales se dirige la demanda de conciliación". Por eso, insisten en pedir a los diputados que rectifiquen y tomen medidas para prevenir que estos hechos se repitan, en un caso que la asociación se siente con la obligación de llevar a los tribunales "para exigir responsabilidad política".