Una carroza ha captado toda la atención en el carnaval de Solsona: el barco de los piolines. El disfraz, inspirado en el barco policial que llegó a Barcelona para impedir el referéndum, ha sido el más comentado.
A la actuación no le faltaba de nada. Sobre un barco -de aspecto más bien pirata-, un grupo de personas disfrazadas de agentes antidisturbios han recorrido todo el desfile lanzando harina y papeletas sobre el público que esperaba a ambos lados de la calle.
Los 'policías' iban armados con porras, con las que daban golpes a urnas originales del 1-O llenas de sobres. En la proa del barco había un peluche del personaje de dibujos animados Piolín colgado del cuello con una cuerda.