La diputada Cristina Casol, ahora no adscrita a ningún grupo parlamentario después de ser expulsada del de Junts a raíz de la denuncia pública de supuesto acoso en razón de género —denuncia ya archivada por parte del Parlament por falta de hechos probados—, ha acusado a la presidenta del Parlament, Anna Erra, de haber utilizado su cargo de manera "partidista", de acuerdo con los intereses de Junts, en su caso y en el de Aurora Madaula. "Cuando eres presidenta de una institución, tienes que intentar que todos los diputados se encuentren bien. Y cuando oyes que alguien está sufriendo, lo primero que tienes que hacer es ver qué pasa", ha argumentado Casol este miércoles en una entrevista en RTVE. Por el contrario, a pesar de admitir que la presidenta de Junts, Laura Borràs, no le ha dado apoyo en público de manera explícita, ha asegurado que sí que lo ha hecho implícitamente y en el ámbito personal. En este sentido, ha dicho que no ha echado de menos el apoyo de Borràs y que tampoco está decepcionada.
La parlamentaria exjuntaire ha explicado que Erra no ha hablado con ella después de su denuncia. Casol también ha recriminado a la presidenta del Parlament que pidiera a Madaula que dejara su cargo en la Mesa de la Cámara cuando la diputada de Junts denunció violencias silenciadas por parte de compañeros de grupo. Y ha lamentado la actitud que, según Casol, también ha tenido con ella. "La presidenta Erra conmigo no ha hablado. Todos lo dan todo por hecho", ha añadido. La diputada también ve "mala intención" en la decisión de situarla, como diputada no adscrita, en una zona del hemiciclo donde están los diputados de Vox y de C's. "Me sabe mal que Junts y PSC se pongan de acuerdo para ponerme allí. Me ponen en un ambiente que es más duro para mí", ha valorado.
Junts es "un partido machista"
Cristina Casol considera que Junts es un "partido machista" porque, según argumenta, ella ha sufrido este machismo por parte del grupo del partido en el Parlament, a quien ha atribuido una "manera antigua de hacer política" basada al "estar conmigo o contra mí". La diputada exjuntaire se plantea llevar a Junts a los tribunales, pero antes esperará a ver cómo la Oficina de Igualdad del Parlamento resuelve el caso de la diputada Aurora Madaula, que también ha denunciado acoso por razón de género. Por su parte, Junts per Catalunya niega que haya machismo en sus filas. “Hay debate político”, rebatió el vicepresidente y portavoz del partido, Josep Rius, en una entrevista en el ‘Cafè d’Idees’ de RTVE a finales de enero.
"Machismo muy agresivo" ante la discrepancia ideológica, según Casol
Después de ser "expulsada" del grupo parlamentario de Junts por la denuncia archivada por acoso machista, Cristina Casol ya anunció en enero que está tramitando su baja como militante por "coherencia" y "está valorando con sus abogados" llevar su caso a los tribunales. "La ley de igualdad española dice que, cuando una mujer denuncia machismo, no puede haber represalias, y la expulsión del grupo es una represalia", argumentó Casol en una entrevista en el 3Cat. En este sentido, la diputada ha señalado reiteradamente al presidente del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, por "combatir la diferencia ideológica con un machismo muy agresivo".
Cristina Casol ya explicó que redactó un informe para la Oficina de Igualdad del Parlament con hechos presuntamente sufridos: "Regañadas en público en el hemiciclo, menosprecio por la ropa que llevaba, abuso de poder, cambios absurdos de comisiones, aislamiento...". Una denuncia que focalizó en Albert Batet. La ahora diputada no adscrita ha explicado también que durante la legislatura, en contra del criterio de la mayoría, ha "cuestionado" los Juegos de Olímpico de Invierno, el proyecto del Hard Rock o las viviendas de uso turístico". "Han combatido contra esta diferencia ideológica y la han combatido con un machismo muy agresivo", ha denunciado.