Después de que haya salido a la luz el informe que el CNI ha llevado al presidente español, Mariano Rajoy, poniendo sobre la mesa que el delegado del Govern en Austria, Adam Casals, está llevando con éxito las relaciones entre Catalunya y la Unión Europea, El Nacional se ha puesto en contacto con Casals, que ha afirmado que, si este documento es cierto, quiere decir que "el Estado ya no considera que la Generalitat y Catalunya formen parte de España".
El informe destaca que la labor del delegado catalán va más allá de sus atribuciones porque se encarga de las relaciones no solo con Austria, sino también con Eslovenia, Croacia, República Checa, Eslovaquia y Hungría. Países que, precisamente, no hace más de 30 años que se independizaron.
Siempre hablando desde su punto de vista personal, el delegado del Govern en Austria ha lamentado de que el Estado gaste dinero en "espiar" al Govern y no "a protegernos de amenazas", como, por ejemplo, amenazas terroristas, pero se ha mostrado convencido que el documento del CNI "demuestra que David gana a Goliat".
Y es que mientras que el ejecutivo catalán "trabaja en favor de Catalunya y no en contra de España, sino para una España mejor", el Gobierno español –en plena Operación Diálogo– sigue persiguiendo las acciones políticas de Catalunya.
Sin embargo, la persecución del Estado no es un hecho menor. Casals ha subrayado que "es muy grave" que el Estado espíe actividades de un gobierno amigo y hermano porque, ha destacado, "Catalunya no es Corea del Norte".