La fórmula utilizada para preguntar a los catalanes si quieren o no la independencia incide en el resultado final. El president de la Generalitat tiene dos maneras de hacerlo: a través de un referéndum, como hicieron Puigdemont y Junqueras, o con unas elecciones plebiscitarias, la opción que escogió Mas. Quim Torra se ha mostrado en privado más partidario de esta última vía.
Según el barómetro del Centro de Estudios de Opinión conocido este viernes, a través de unas elecciones el independentismo superaría por primera vez el 50% de los votos, alcanzando el 51,7%. Sería el resultado de la suma de los porcentajes que obtendrían ERC, JxCat y la CUP. Ahora estas fuerzas acumulan el 47,6%.
En cambio, cuando la pregunta es directa, como pasaría en un referéndum, como: "¿Quiere que Catalunya sea un estado independiente?", se vuelven las tornas. El 'no' es la opción mayoritaria, con un 47,9%, por un 43,7 que votarían a favor. Se mantiene así la tendencia que se inició en julio pasado, cuando por primera vez desde octubre de 2017 los contrarios a la independencia pasaron por delante de los partidarios.
El trabajo de campo para elaborar la proyección empezó justo después de las elecciones españolas del 10-N y se alargó hasta principios de este mes. Concretamente fue entre el 14 de noviembre y el 5 de diciembre, una diferencia de cuatro puntos. Por lo tanto, con las condenas contra los líderes independentistas catalanes ya encima de la mesa, con las conversaciones entre ERC y el PSOE ya en marcha, pero sin conocer todavía las dos noticias que han sacudido la actualidad política y judicial en Catalunya, España y Europa: la inmunidad de Junqueras y la inhabilitación de Torra.