La consellera de Drets Socials, Violant Cervera, ha lamentado que el Govern no tenga las competencias suficientes para impulsar los cambios necesarios a la ley de extranjería para poder "legalizar" la situación de menores y jóvenes migrados. Quien tiene las herramientas para hacerlo es el ejecutivo de Pedro Sánchez, a quien ha pedido que haga las modificaciones necesarias.

Cervera se ha mostrado "muy preocupada" por las deportaciones de niños y adolescentes en Ceuta y ha hecho un llamamiento a "recapacitar sobre lo que está pasando. "Es triste que estén vulnerando sus derechos internacionales, se tiene que buscar una solución que les permita tener una situación legalizada", ha insistido en una entrevista publicada este jueves por la ACN.

La falta de competencias dificulta la actuación

La consellera ha señalado que hay que arreglar la documentación de los menores que ya se encuentran en el país sin papeles para evitar que se conviertan en "víctimas del subsidio". Sobre todo cuando pueden llegar más próximamente, refiriéndose a los asilados políticos de Afganistán. En esta línea, Cervera ha criticado que haya gente que se centre solo en esta cuestión, pero ha subrayado la importancia de ayudar a los refugiados que escapan del régimen talibán.

Ayudarlos no será fácil: que el Govern no tenga las competencias en extranjería dificulta la actuación, según Cervera. "Las situaciones más complejas no las podemos gestionar en Catalunya", algo que "como país nos debilita y no nos permite atender las necesidades de los ciudadanos". De momento, el ejecutivo catalán solo se ha podido ofrecer a acoger refugiados.

5.000 jóvenes tutelados, 1.500 menores

Hay que recordar que el Gobierno tiene actualmente unos 5.000 jóvenes tutelados, de los cuales 1.500 son menores. "Queremos ayudarlos y que tengan futuro, pero no depende exclusivamente de nosotros", ha indicado la consellera.

A pesar de la falta de competencias, Cervera ha insistido en el hecho de que Catalunya ha sido capaz de integrar un importante volumen de niños que llegaron de golpe, un encaje que reconoce que no ha sido sencillo. "No estábamos preparados, pero ahora ya no nos encontramos en esta situación", ha asegurado.

Menores en Ceuta / Efe

El país dispone ahora de los dispositivos de atención inmediata, gestionados por la Cruz Roja. Unos dispositivos que permiten ganar el tiempo suficiente para repartir a los menores en diferentes recursos. "Tenemos unas 1.500 plazas, ahora hay unas 450 libres, así que disponemos de cierto margen para poder atenderlos a medida que llegan", ha afirmado la consellera. "Si se agotan, pondremos más", ha añadido.

Pero lo más importante es que los menores tengan papeles para poder encontrar trabajo una vez se marchan de los equipamientos: "Por mucho que ampliemos el acompañamiento, la integración es imposible si después no tienen trabajo", ha recordado. "Hay que encontrar algún tipo de solución" para que puedan trabajar de forma legal, ha concluido Cervera.

 

Imagen principal: La consellera de Drets Socials, Violant Cervera / ACN