Uno de los aspectos que la cumbre de la OTAN celebrada esta semana en Madrid cerrará es la protección de Ceuta y Melilla debajo el paraguas de esta organización. Así lo ha avanzado El País: "Eso significa que incluirá por primera vez la defensa de la soberanía y la integridad territorial de los países aliados como misión fundamental de la organización, según fuentes que han tenido acceso a los últimos borradores del documento que se aprobará a la cumbre".
Hace falta recordar que el artículo quinto del Tratado de Washington señala que el ataque contra cualquier miembro de la OTAN se considerará un ataque contra todos, pero restringe este compromiso al llamado espacio euroatlántico, limitado al territorio de los países aliados en Europa, la Norteamérica, la parte asiática de Turquía y las islas situadas en el norte del trópico de Cáncer, aquí se incluye las Canarias pero no Ceuta y Melilla. Dejar atrás esta exclusión también sirve para marcar un mensaje de poder y subrayar el papel predominante que la OTAN quiere tener: "Defendemos cada parte del territorio nuestro", ha recordado su secretario general, Jens Stoltenberg.
¿Consecuencia de Putin?
Reforzar las fronteras de la OTAN en Ceuta y Melilla coincide con la tragedia vivida en esta última frontera este fin de semana, pero es un mensaje que ya se pensó anteriormente derivado de la crisis que ha marcado la guerra en Ucrania y el desafío que plantea a Vladimir Putin con sus fronteras, también con Finlandia. Por todo ello, la OTAN refuerza su principal y único mensaje: "La seguridad a nuestras vidas diarias es clave para nuestro bienestar. La finalidad es garantizar la libertad y la seguridad de los países miembros por medios políticos y militares". Y en este último concepto, el militar, añade: "Cuando los esfuerzos diplomáticos no dan fruto, la fuerza militar emprende operaciones de gestión de crisis. Estas operaciones se llevan a cabo bajo la cláusula de defensa colectiva del tratado fundacional de la OTAN o por mandato de las Naciones Unidas, por sí sola o en cooperación con otros países y organismos internacionales".
La última hora de esta cumbre es la llegada de Jill Biden, primera dama de los Estados Unidos, a Madrid que se ha reunido con la reina Letizia en el Palau de la Zarzuela. La capital española acogerá los días 28, 29 y 30 - martes, miércoles y jueves, la Cumbre de la OTAN. Y eso repercutirá en las líneas de Metro. Tanto es así que el alcalde José Luis Martínez-Almeida, instó el jueves pasado a las empresas a facilitar el teletrabajo durante estos días, ya que se esperan jornadas complicadas.