Ciudadanos ya es historia en Andalucía. Los andaluces han eliminado del mapa el partido de Inés Arrimadas en las elecciones de este domingo, y la formación naranja acumula de esta manera un nuevo derrumbe histórico para añadir a su lista de derrotas. Han pasado de gobernar la comunidad autónoma de la mano del PP y tener 21 diputados en el Parlamento de Andalucía a no tener ninguno. El Partido Popular y Vox se han comido los votos que Ciudadanos había aglutinado en las últimas elecciones (el PP ha pasado de 26 escaños a tener 58, y Vox ha pasado de 12 a 14). Hay que tener en cuenta las últimas palizas electorales que ha sufrido la formación: en cuestión de meses, Cs ha pasado de tener 26 diputados en la Comunidad de Madrid a no tener ninguno ni uno; y de tener 12 en Castilla y León para pasar a conservar solo uno.
Ante estos pésimos resultados de la formación, el líder de los naranjas en Andalucía, Juan Marín, que hasta ahora ha sido vicepresidente de la Junta de Andalucía, ha anunciado que este lunes a primera hora presentará su dimisión de todos sus cargos. "Soy una persona que siempre cumple su palabra", ha manifestado en declaraciones ante los periodistas una vez el escrutinio ya superaba el 90%. Ha dicho también que pone su cargo "a disposición de la dirección, para que en mi lugar sitúe a alguna mujer o algún hombre que lo pueda hacer mejor que yo". Durante las últimas semanas, las encuestas ya pronosticaban el derrumbe casi definitivo de Ciudadanos. Algunas de estas otorgaban al partido de Inés Arrimadas pocos diputados, pero otros preveían su desaparición. De hecho, los sondeos que se han hecho este mismo domingo a pie de urna concluían de manera muy clara que la formación naranja estaba destinada a desaparecer del mapa andaluz.
El derrumbe de Ciudadanos en estos comicios de Andalucía llega dos años y medio después del traspié histórico que sufrió la formación en las elecciones españolas de noviembre del 2019. El partido perdió a 47 diputados en el Congreso y se quedó con solamente una decena de parlamentarios en la cámara baja. Diez diputados comandados desde entonces por Inés Arrimadas, que cogió las riendas del partido después de que la sangría provocara la dimisión inmediata del hasta entonces presidente del partido, Albert Rivera.
Faltaba entonces un año y poco para que llegara el segundo gran capítulo del derrumbe de Ciudadanos. El 14 de febrero de 2021, con elecciones en Catalunya, la formación de Inés Arrimadas pasaba de haber sido el partido más votado en las anteriores elecciones catalanas (las del 21 de diciembre del 2017) a perder a 30 diputados y situarse en penúltimo lugar, por delante solo del PP. La formación se tuvo que sentar en el hemiciclo catalán con únicamente seis diputados. Y este 2022, el partido de Arrimadas ha sufrido ya dos grandes derrotas, además de la andaluza: Ciudadanos también desapareció de la Comunidad de Madrid, pasando de 26 diputados a no tener ninguno; y a las últimas elecciones de Castilla y León consiguió obtener solo uno.